18 muertos en aniversario de la revolución egipcia

La Policía reprimió a los manifestantes que además de celebrar el cuarto aniversario del inicio de la revuelta contra Hosni Mubarak están en contra del actual gobierno.

Los manifestantes, además de celebrar los cuatro años de la revuelta, están en contra del régimen del exjefe del Ejército Abdel Fatah Al Sisi

Los manifestantes, además de celebrar los cuatro años de la revuelta, están en contra del régimen del exjefe del Ejército Abdel Fatah Al Sisi

Al menos 18 personas murieron este domingo y otras 80 resultaron heridas, la mayoría en enfrentamientos entre policías y manifestantes opositores en Egipto, en el cuarto aniversario de la revolución que desbancó del poder a Hosni Mubarak. 



Según declaraciones del portavoz del Ministerio egipcio de Sanidad, Hosam Abdelgafar, a la agencia oficial MENA las 18 personas fallecieron en las provincias de El Cairo, Alejandría, Damieta y Al Beheira, mientras que también se registraron heridos en Kafer Sheij, Al Minia y Guiza.

Con anterioridad, Abdelgafar había indicado a Efe de que se había
contabilizado doce fallecidos en la zona de Al Matariya, en la capital egipcia.

El Ministerio de Interior, por su parte, había informado de la muerte de dos personas por la explosión de un artefacto que estaban manipulando en la provincia de Al Beheira, en el delta del río Nilo. 

Portavoces de Interior también anunciaron la muerte de al menos un recluta de la Policía en los barrios cairotas de Al Matariya y de la zona de Ain Shams, donde, según las autoridades, los manifestantes abrieron fuego en esos lugares contra las fuerzas de seguridad, lanzando perdigones, fuegos artificiales y cócteles molotov.

Mubarak cayó tras 18 días de revuelta 

El 25 de enero de 2011 marca el inicio de 18 días de masivas manifestaciones que obligaron a Mubarak a dimitir el 11 de febrero.

Al Sisi, elegido en mayo pasado con más del 90% de los votos tras haber depuesto a Mursi en julio de 2013, tiene el apoyo de gran parte de la opinión pública, harta de cuatro años de inestabilidad política y de crisis económica.

Pero Al Sisi es acusado de haber instaurado un régimen aún más autoritario que el de Mubarak, y de reprimir cualquier tipo de oposición, que sea laica o islamista.

Depués de la destitución de Mursi en 2013, soldados y policías han matado a más de 1.400 manifestantes islamistas y más de 15.000 personas han sido detenidas. La ONU denuncia asimismo las penas de muerte pronunciadas en procesos colectivos, a los que considera que no tienen «precedente en la historia reciente» del país.

Los grupos yihadistas, que dicen actuar en represalia por esta represión, han multiplicado los ataques contra las fuerzas de seguridad en todo el país.

Fuente: eldeber.com.bo