Pasajero: Nos balanceamos como si se cayera la cabina; pánico en teleférico de La Paz

Los ocupantes sufrieron fuertes golpes. Antonio Cuentas sentía dolor en su cuerpo, sobre todo en su pecho y brazo; y su compañera no podía mover el cuello ni el pie.

Pasajero: Nos balanceamos como si se cayera la cabina

Uno de los afectados iba a su trabajo en la zona Sur de La Paz.

image Página Siete. El personal del teleférico pedía paciencia y calma a los pasajeros por intercomunicador.



PÁGINA SIETE  / La Paz

A las 22:05 de anoche, Página Siete habló con Antonio Cuentas, uno de los dos pasajeros de las cabinas de la Línea Amarilla del teleférico que quedaron suspendidas a la altura de la zona de Cotahuma.

Cuentas y su acompañante Lucía -de quien no pudo precisar su apellido- no recordaban la hora precisa del incidente. «No me acuerdo; debieron ser las ocho menos cinco”, dijo por vía telefónica.

A esa hora los pasajeros sintieron un brusco movimiento. «Hemos empezado a balancearnos como si se hubiera caído la cabina”, contó el pasajero afectado.

El movimiento causó que los ocupantes se golpearan y sufrieran daños. «Estoy con una amiga más; ella está más lastimada”. «Su cuello no puede mover, en su cabeza tiene un chinchón y su pie no puede mover”, contó.

«Nos hemos golpeado los dos; a mi recién me está empezando a doler mi cuerpo, mi pecho especialmente, y mis brazos”. «(Me duele) mi brazo por la fuerza que he hecho, pero mi pecho por el golpe que he sentido”. «Yo estoy moviendo mi brazo a cada momento por el dolor que molesta mi pecho”, afirmó.

La cabina quedó suspendida a la altura de la segunda torre antes de llegar a la estación de Cotahuma. Cuentas podía ver a un grupo de gente y a la Policía. «Están trabajando en la segunda torre antes de llegar a la segunda estación”, contó.

El personal del Teleférico se comunicaba con los pasajeros por intercomunicador. Les pedían paciencia y les explicaron que el rescate demoraría, pero que trataban de resolver el problema «lo más pronto posible”.

También les proporcionaron un número de celular. Este medio se comunicó con el número proporcionado por el personal del medio de transporte que correspondía al Presidente de Rescatistas Unidos Sin Fronteras, Richard Arana, que colaboraba con las personas afectadas.

«Tenemos una psicóloga que se contactó con cada una de las cabinas.  Había personas asustadas y con frío. El personal del teleférico tiene gente capacitada para estas urgencias. Se instaló un sistema para atender a toda la gente. En estos casos lo importante es el apoyo psicológico”, aseguró el especialista.

Página Siete solicitó hablar con la otra pasajera de la cabina pero ella estaba muy afectada y no podía hacerlo. «Está un poco asustada”, refirió Cuentas.

El pasajero abordó la cabina para dirigirse a su fuente laboral, ubicada en la zona de Auquisamaña de la zona Sur de La Paz.

«Estamos atrapados”

Hora.  El percance ocurrió alrededor de las 19:55.

Pasajeros.  Antonio Cuentas que se dirigía a su trabajo en la zona de Auquisamaña. 

Emergencia. La acompañante de Cuentas no podía mover el cuello ni un pie. Además tenía un chinchón en su cabeza.

Ayuda.  El grupo Rescatistas Unidos Sin Fronteras participó en el rescate.

«Sentimos un fuerte movimiento. En la primera hora nadie se comunicó con nosotros. Después nos pidieron calma. No tenemos ni un botiquín en la cabina y hay una persona embarazada en la otra

cabina” 

Marco Flor (24 años) estuvo en una cabina del teleférico.

«Lo que vi es tambalear una de las cabinas. Pero quiero aclarar que hace tiempo se pidió el podado del árbol, pero algunos vecinos se opusieron. Mandamos cartas a la Alcaldía, pero no nos ayudaron y ahora lamentamos esto” 

Vecina de Cotahuma

«Un árbol de eucalipto cayó aproximadamente entre 30 a 40 metros. La copa golpeó una de las  casetas y provocó un problema en un cable y a 16 casetas. Las cabinas quedaron flotando en el aire. Gracias a Dios no hubo víctimas”  

Pablo Flores, Cotahuma