Prohíben uso de cámaras en ambientes laborales

Polémica. La medida genera posiciones divididas entre trabajadores y empresarios que sugieren replantear la idea.

Ref. Fotografia: En la mira. La instalación de cámaras tiene sus pro y contras sobre los derechos y la seguridad.

La aprobación de una Resolución Ministerial para regular el uso de las cámaras de vigilancia en las empresas privadas del país, ha causado repercusiones en favor y en contra de esta iniciativa que apunta a dar tranquilidad y respeto a la privacidad de los trabajadores.



Si bien la medida fue tomada luego de varias denuncias de trabajadores que rechazan la instalación de cámaras de vigilancia dentro de los centros laborales, por presunta vulneración de la dignidad del empleado, la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), a través de su presidente Daniel Sánchez, ha solicitado anular la normativa por considerarla que atenta contra la seguridad de las empresas y de los mismos trabajadores.

Debate sobre la seguridad. Según la viceministra de Trabajo, Giovanna Maldonado, la nueva norma prohíbe totalmente las cámaras de seguridad dentro del centro laboral.

«No podemos sancionarla porque no contamos con una normativa que prohíba el uso de estas cámaras, pero sin embargo lo que se ha hecho es regular el uso de las cámaras de vigilancia con la resolución 061/2015, manifestando que están totalmente prohibidas las cámaras de seguridad dentro del centro laboral», señaló.

El director general del Trabajo, Miguel Albarracín, explicó que el objetivo de esa resolución ministerial es proteger al trabajador de cualquier vulneración a su intimidad y su privacidad.

Sin embargo, esta decisión no es vista así por Sánchez, «Creo que esta norma va en contra del mensaje que emite a diario el presidente Evo Morales de mejorar la seguridad de los bolivianos, por el contrario, pone en riesgo la seguridad de las empresas y los valores de la mismas así como la de los trabajadores», señaló a tiempo de reiterar su posición al ejecutivo para replantear la medida.

«La incorporación de cámaras en instituciones ha permitido develar muchas anticonductas que no favorecen no solo a la empresa sino a nivel general en casos de robos o actos de violencia, creo que se debe anular y hacer otras más importantes», apuntó.

Trabajadores a favor. El secretario ejecutivo de la Central Obrera Departamental (COD) de la Paz, Hugo Torres, adujo que «Con estas cámaras es trabajar como con dos, tres y hasta cuatro vigilantes al mismo tiempo». A su juicio, las cámaras de vigilancia deberían estar en el perímetro de una empresa, no así dentro del lugar de trabajo. Por su parte el ejecutivo de la COD de Santa Cruz,  Iver Peña, respaldó a su igual aduciendo que «las cámaras deben prohibirse dentro de los ambientes laborales, son un atentado a los derechos que tienen los trabajadores a su privacidad y su dignidad».

Fuente: eldia.com.bo