Isabelino Gomez, exfiscal del distrito de Santa Cruz, tuvo que declararse culpable y así logró su excarcelación de Palmasola donde estuvo preso dos años y cinco meses
El exfiscal implicado en red de extorsión sale libre
Isabelino Gómez, exfiscal preso por el caso red de extorsión, logró su excarcelación de Palmasola, donde estuvo preso dos años y cinco meses
EL DEBER, Santa Cruz, Bolivia
El exfiscal Isabelino Gómez (derecha) fue condenado a tres años de prisión en diciembre de 2012 por su implicación en una red de funcionarios que extorsionó al empresario Ostreicher (izquierda). EL DEBER ARCHIVO
Para obtener su libertad Isabelino Gómez, exfiscal del distrito de Santa Cruz, tuvo que declararse culpable, en un juicio abreviado realizado a principios de enero de 2015, en la comisión del delito de organización criminal en contra del empresario judío-estadounidense Jacob Ostreicher.
Gómez había sido enviado a Palmasola junto a más de una decena de jueces, fiscales y funcionarios de Gobierno acusados de integrar una red que extorsionó a Ostreicher, quien había llegado a Santa Cruz, en 2008, para invertir 26 millones de dólares en la producción de arroz.
El abogado del exfiscal, Osvaldo Ribera, informó a ATB que su defendido salió libre luego de permanecer privado de libertad dos años y cinco meses. En diciembre de 2012 había sido condenado a tres años de cárcel.
“Al margen de que su salud estaba completamente deteriorada, estábamos viendo muy difícil obtener su libertad por otro medio”, señaló Ribera a modo de justificar la declaración de culpabilidad de su cliente.
Este caso logró connotación internacional debido a que el Senado de EEUU y el reconocido actor Sean Penn salieron en defensa del empresario, incluso Penn llegó a sugerir que el Rally Dakar no pase por Bolivia como represalia por creer que en este país no se respetan los derechos humanos.
Jacob fue arrestado en enero de 2011 acusado de legitimación de ganancias ilícitas y sin sentencia permaneció 18 meses preso en Palmasola hasta que la jueza Eneas Gentile, el 18 de diciembre de 2012, le otorgó detención domiciliaria. Un año después se fugó de Bolivia a EEUU.