El presidente Evo Morales le habló al “núcleo duro” de su partido, los cocaleros del Chapare, proponiendo avanzar con sus cultivos hacia las tierras del oriente boliviano.“Tenemos millones de hectáreas y buenas tierras en el oriente boliviano, si queremos. Tenemos tierras fiscales, libres de disponibilidad”, dijo el mandatario, quien agregó, aludiendo a una carretera que vinculará al oriente con el trópico de Cochabamba: “Ni se imaginan compañeros, tenemos un lindo proyecto de integración de caminos para nuestra Bolivia, pronto se van a sorprender”.La cocalerización de Santa Cruz y el Beni parece ser una de las prioridades en la agenda presidencial de los próximos años, con lo cual el evismo sumaría un imperio cocalero de oriente al actual imperio de occidente, constituido por El Chapare y enclaves de estos cultivadores en regiones como Apolo.El caudillo planteó falazmente la marcha cocalera hacia el oriente como alternativa a la incursión en zonas como el TIPNIS y el Parque Carrasco, aunque se sospecha que el proyecto es hacer ambas cosas al mismo tiempo.De hecho, la cocalerización del departamento de Santa Cruz ya comenzó en los últimos años, con la toma de parte de la reserva del Choré y del Parque Amboró, y con el pequeño Chapare instalado en la provincia Ichilo.Precisamente a estas zonas no tradicionales es a donde no llega el monitoreo de cultivos realizado por la ONU, que confía para sus estimativos en dichas áreas en los datos que le provee el mismo gobierno cocalero.De ahí que surjan dudas sobre la verdadera extensión de las hectáreas de coca excedentaria en el país, dudas que por ejemplo refleja el reciente informe del Departamento de Estado norteamericano que le quita el sueño a la administración del MAS…[email protected]