Corrupción. Un expresidente de Asamblea General de ONU es detenido por sobornos chinos

Escándalo. John Ashe es acusado de recibir sobornos por $us 1,3 MM

John Ashe, de Antigua y Barbuda, fue presidente de la Asamblea General entre 2013 y 2014

John Ashe, de Antigua y Barbuda, fue presidente de la Asamblea General entre 2013 y 2014. AFP



La Razón / EFE / Nueva York 

El expresidente de la Asamblea General de la ONU John Ashe fue detenido acusado de aceptar sobornos de más de $us 1 millón a cambio de influir en favor de empresarios chinos. Se arrestó a otras cinco personas, incluido un diplomático dominicano.

“Si se demuestran los cargos de hoy (ayer) confirmarán que el cáncer de la corrupción que afecta a demasiados gobiernos locales y estatales infecta también a las Naciones Unidas”, dijo al anunciar la acusación el fiscal federal estadounidense Preet Bharara. Ashe presuntamente se embolsó al menos $us 1,3 millones a cambio de apoyar los intereses de varios empresarios chinos, principalmente los del magnate de la construcción Ng Lap Seng.

Éste pagó supuestamente medio millón de dólares a ese diplomático de Antigua y Barbuda, país al que representó como embajador ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), para que impulsara la construcción de un centro de conferencias de la entidad en el suelo chino de Macao.

Ashe, quien presidió la Asamblea General entre 2013 y 2014, habría aceptado otros $us 800.000 en sobornos de otros empresarios chinos a cambio de influir en decisiones en la ONU y en su país. Según la Fiscalía, parte de ese dinero lo compartió con el entonces primer ministro de su país.

Presuntamente solicitó, además, compensaciones, incluido el pago por parte de terceras partes de gastos personales como vacaciones familiares y la construcción de una pista de baloncesto en su domicilio de Nueva York. Además de por corrupción, Ashe está acusado de fraude fiscal en Estados Unidos por omitir de sus ingresos más de $us 1,2 millones. El magnate chino, cuya fortuna se calcula en $us 1.800 millones, fue detenido el mes pasado por agentes aduaneros en Nueva York, acusado de introducir $us 4,5 millones de forma ilegal.

Los presuntos sobornos a Ashe fueron facilitados por varias personas, también arrestadas, entre ellas el diplomático dominicano Francis Lorenzo, identificado como embajador adjunto de su país ante la ONU. Bharara acusó a Ashe de “haberse vendido a sí mismo y a la institución global que lideraba” a cambio de relojes “Rolex, trajes a medida y una pista privada de baloncesto”.

Ban Ki-moon se declara ‘estupefacto’ por el caso

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, a través de su portavoz, declaró que está “estupefacto” y “profundamente preocupado” ante la acusación contra el expresidente de la Asamblea General del organismo, John Ashe ((2013-2014) por recibir sobornos por un monto de $us 1,3 millones. Stéphane Dujarric dijo que la Secretaría cooperará con la investigación si es necesario.

Además, defendió que la corrupción no es algo habitual en la ONU y recordó que el de presidente de la Asamblea General es un cargo político que no rinde cuentas ante el secretario general.  “La corrupción no tiene sitio en las Naciones Unidas ni en ningún otro lugar”, añadió el actual presidente de la Asamblea, el danés Mogens Lykketoft.

“Estoy impactado y creo que a la ONU y sus representantes se les deben exigir los más altos estándares”. Admitió que de confirmarse el escándalo supondría “un ataque en el corazón de la integridad de las Naciones Unidas”.