La Asociación de Cultivadores de Caña de Azúcar de Colombia (ASOCAÑA), las empresas CIAMSA y DICSA, doce ingenios y 14 altos directivos fueron sancionados con una multa de $us 110 millones por ‘cartelización empresarial’ al obstruir la importación de azúcar de los mercados de Bolivia, Guatemala, El Salvador y Costa Rica, informó la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC).
La entidad regulatoria “sancionó a ASOCAÑA, CIAMSA, DICSA y DOCE (12) INGENIOS AZUCAREROS por haber incurrido en la conducta de acuerdos anticompetitivos o cartelización empresarial para obstruir de manera concertada, coordinada y continuada, las importaciones de azúcar hacia Colombia provenientes, fundamentalmente, de Bolivia, Guatemala, El Salvador y Costa Rica”, refiere parte del informe publicado en el portal digital de la entidad pública.
Uno de los antecedentes encontrados y descritos en el documento público de la investigación está referido al desarrollo de negociaciones con ingenios bolivianos “con el propósito exclusivo de controlar sus excedentes y procurar que estos no exportaran ‘ ni un grano de azúcar a Colombia’, y evitar que mayoristas y comerciantes colombianos acceden al producto vía importaciones.
Los investigados incurrieron en la ‘cartelización empresarial’ para evitar que aumentara la oferta y disminuyera el precio interno que pagan los consumidores y la industria. Como parte de la estrategia, incluso, crearon empresas para adquirir excedentes regionales y evitar su exportación al mercado colombiano, detalla la pesquisa.
La SIC acusa también al Fondo de Estabilización de Precios de Azúcar (FEPA) -el organismo público encargado de garantizar la competencia- de facilitar la cartelización, según reportó la agencia AFP desde Bogotá. La investigación se inició en 2010 tras denuncias presentadas por varios empresarios consumidores de azúcar, entre ellos, Coca-Cola Femsa, Nestlé de Colombia y Bimbo de Colombia.
“ De otra parte, la Superindustria concluyó que el FEPA como mecanismo de intervención del Estado en la economía, fue desnaturalizado por las decisiones que durante muchos años adoptó su Comité Directivo, convirtiéndolo en un instrumento idóneo para la repartición de cuotas de producción o suministro de azúcar en el mercado colombiano”, refiere otra parte del informe.