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| El viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Felipe Cáceres, asistió a las tareas de interdicción al narcotráfico y erradicación de coca en comunidades del Parque Nacional Madidi, en octubre pasado. Foto ABI. |
La Paz, 12 nov (ABI).- El Gobierno cumplió el Plan de Acción 2011-2015 de la Estrategia Hemisférica Antidroga 2010 y el Mecanismo de Evaluación Multilateral (MEM) y la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó la política de nacionalización en materia de lucha contra el narcotráfico, dijo el jueves el viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Felipe Cáceres.»El Mecanismo de Evaluación Multilateral calificó a los 34 Estados que forman la OEA y realizó recomendaciones si los países tienen fortalezas y debilidades, pero se avaló a Bolivia por la estrategia basada en la nacionalización antidroga y debemos estar orgullosos porque se valora nuestro esfuerzo», afirmó a la ABI desde Trujillo, Perú.En esa ciudad peruana se desarrolla la 58 Sesión Ordinaria de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (CICAD), donde se destacó el informe de Bolivia, sobre todo, en interdicción y represión al narcotráfico, además de la reducción de cocales ilegales y excedentarios, el fortalecimiento institucional, la reducción de la demanda y la oferta, las medidas de control y la cooperación internacional.Cáceres reconoció que hay pequeñas debilidades que serán superadas para fortalecer la implementación de la Estrategia de Lucha Antidroga y la Reducción de Cultivos Excedentarios de Coca y crear un observatorio de drogas, entre otras medidas.Para el Jefe Antidroga, la reunión anual de la CICAD es importante porque no solamente identifica las fortalezas de la política antidroga, sino sugiere retos de los países, además, de fomentar la confianza mutua, el diálogo y la cooperación internacional.Los expertos bolivianos saldrán al exterior para la evaluación de resultados, según recomendaciones de la OEA, cuyos datos serán cruzados con las Naciones Unidas.Apuntó que el MEM es un proceso único y objetivo de evaluación gubernamental, de carácter multilateral, creado en la II Cumbre de las Américas (Chile, 1998) por 34 Estados Miembros de la OEA, para dar seguimiento al progreso individual y colectivo de todos los esfuerzos hemisféricos en tratamiento de variadas expresiones de las drogas.