Porque cuidar tu bella piel es importante a todas las edades 🙂
Los años van pasando y a veces olvidamos ciertas pautas del cuidado de la piel o directamente ni las conocemos. Estos errores acumulados terminan resultando en un rostro avejentado y sufrido a corta edad, algo que seguramente no quieres y que es fácil de evitar.
Así que aprende a cuidar la piel según tu edad eludiendo los errores más comunes…
A los 20: No aplicar protector solar
Lo dijimos tantas veces que a esta altura ya lo debes saber de memoria: es fundamental que todos los días le apliques cremas con protector solar a la piel del rostro, y que cada dos horas te lo vuelvas a poner para asegurarte de que no pierda efecto.
A los 20: No desinfectar tu teléfono celular
Lo usas todo el día y a toda hora, por lo que se convierte en una verdadera fuente de bacterias. Si no sabes por qué a esta edad tienes brotes de acné, tu teléfono puede ser la respuesta, porque permanentemente lo llevas a tu cara.
¿Nuestra recomendación? Desinféctalo periódicamente con toallitas antibacterianas.
A los 20: Tratar al acné como cuando eras adolescente
Las espinillas y granos después de los 20 son distintos a cuando eras más joven, porque ahora tu piel es un poco más seca y delgada y el acné es más profundo y quístico.Antes utilizabas productos con peróxido de benzoilo y ácido salicílico, pero hoy deberías otros con azufre o niacinamida.
A los 20: No usar productos anti-edad
Aunque aún eres joven, deberías empezar a cuidar tu piel para mantener alejadas las arrugas. Comienza a utilizar a tus 20 años alguna crema hidratante y con propiedades antiage.
A los 30: Saltear tu rutina de cuidado de la piel
Quedarte dormida sin retirar tu maquillaje no es una opción a los 30 años. El secreto para una piel perfecta es prevenir daños durante el día y reparar por la noche.Por lo tanto, tu rutina al despertar y antes de dormir será fundamental.
A los 30: No adaptar los productos a la edad de tu piel
La piel de los 20 ya fue. Hoy tu situación es distinta: la piel es más seca, la renovación celular y la producción de colágeno se vuelve más lenta y el tono de piel es ya más irregular.Haz un balance de tu situación actual y elige productos que se adapten a ella, según tengas manchas, falta de brillo, arrugas…
A los 30: Exfoliar en exceso
En tu intento por recuperar el brillo de tus 20, ahora exfolias tan seguido que dañas más tu rostro. Limítate a hacerlo 2 veces por semana como máximo, porque puedes romper tus capilares y favorecer las líneas de expresión.
A los 30: No revisar tus lunares
¡Nunca los olvides! Con los años, tus lunares debe ser revisados anualmente por un dermatólogo. Toma no más de 10 minutos y te salva de graves problemas.
A los 40: No hidratar lo suficiente
La necesidad de hidratación de tu piel ha cambiado en esta última década. Se ha vuelto mucho más seca y necesita un cuidado especial.¿Entonces? Aumenta la hidratación sin obstruir los poros con una crema hidratante profunda no comedogénica.
A los 40: Mezclar muchos productos
En tu afán por cuidar la piel utilizas varios productos, uno sobre otro, que contienen ingredientes activos que juntos empeoran tu situación en lugar de mejorarla.Esta es la solución: elegir un producto que cubra todas tus necesidades o esperar entre aplicación y aplicación los minutos suficientes para que la crema o suero sea absorbido por completo.
A los 40: No usar crema contorno de ojos
Sabes que allí se concentran las primeras y más profundas arrugas, pero no cuidas el área como deberías. Utiliza una crema especialmente formulada para la zona, sin fragancia y con ingredientes activos; ellos se encargarán de alejar a las arrugas.
Fuente: www.imujer.com