El “NO” de Rubén Costas

MANFREDManfredo Kempff SuárezHace tiempo que el gobernador Rubén Costas había anunciado su indeclinable posición en contra del caciquismo perpetuo y maleado que está detrás de la re-re-reelección de S.E. con ánimos de ganar el referéndum nacional y sobre todo en Santa Cruz. Ante la penosa deserción de algunos cruceños que se volcaron hacia el andino-centrismo, el resultado de la consulta en nuestro departamento parecía complicado, pero a partir del jueves último, parece que el riesgo ha pasado.Estábamos decididos a no escribir sobre política en estos días del carnaval, pero lo dicho por el Gobernador ha sido muy importante como para hablar sólo de comparsas y de nuestra simpática Reina. Al margen del informe de sus labores de una década, que fueron extraordinariamente importantes, Rubén Costas reiteró claramente su posición por el NO, algo que extrañamente ha sido ignorado por la prensa cruceña, no así por la de La Paz que lo destacó. Curiosamente también, en el auditorio repleto de pueblo, se notó la ausencia de algunas instituciones, aunque estuvieron firmes los presidentes del Comité Cívico y de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz.Casi todos los jefes políticos ya han fijado su posición en contra del prorrogismo masista. Lo han hecho Doria Medina, Tuto Quiroga, Revilla, Patzi, Terrazas, Quispe, y un sinfín de políticos que no ganarán indulgencias sino que tratarán de detener el atropello. Están queriendo frenar el “achacollismo” reinante. En Santa Cruz han sido los Demócratas quienes más han denunciado el manoseo constitucional, pero, para que no quede duda alguna, Costas ha afirmado que “la limitación de mandatos (él ha anunciado que no candidateará más a la Gobernación) es el mejor instrumento de lucha contra la corrupción y la tiranía, y por eso me he posesionado claramente por el NO en el referéndum”. Ni como errarle.Un político como Costas no podía sino confirmar lo que todos sabíamos en Santa Cruz. Que no iba a dar su brazo a torcer y que no se vendería ni por adulos ni por promesas. Eso a costa de que el Gobierno se indigne y continúe saboteando su gestión agregando pleitos a su ya muy nutrida agenda de juicios pendientes. Un asambleísta que oficia de portavoz del MAS y que parece salido de la terapia intensiva de un hospital ha sido el primero en aparecer hablando, como siempre, una sarta de disparates mal hilvanados. Ahora vendrá la arremetida de los que están temblando ante la idea de ir a un pronto juicio de responsabilidades.