Podemos y su relación con Irán

iglesias-fort-apacheElías CohenVarios medios de comunicación se han hecho eco de la exclusiva publicada por OK Diario: la Unidad de Delitos Económicos y Fiscales (UDEF) de la Policía Nacional está investigando la posible financiación ilegal de Podemos a través de los fondos que supuestamente ha estado recibiendo del Gobierno de Irán, que pueden ascender a 5 millones de euros, a través de la productora Global Media S.L., sociedad de la que es administrador el empresario iraní Mahmud Alizadeh Azimi y que es la productora de Hispan TV.Pero, y dejando a un lado lo que deparará la investigación de la UDEF, la relación entre Irán y el líder de Podemos, Pablo Iglesias, es un hecho incontestable. El primero en resaltarlo fue el mismo Pablo Iglesias, cuando, en una conferencia universitaria para las Juventudes Comunistas, explicó cómo podía hacer un programa de televisión, Fort Apache, para Hispan TV, cadena del régimen de los ayatolás. Interesa transcribir la respuesta para entender la simbiosis entre un proyecto de izquierdas y un medio de comunicación que promueve valores teocráticos:Mucha gente puede decir: «Pero vosotros, si sois de izquierdas, ¿por qué aceptáis hacer un programa [Fort Apache] para un Gobierno como el de Irán, que es una teocracia, que no podéis estar de acuerdo con Irán?; o ¿aceptaríais hacer algo para una televisión financiada por el Gobierno de Putin?». Y es como, pues, mira, la geopolítica es así, y no vamos a ser los únicos imbéciles que no hagamos política mientras todo el mundo hace política (…).Así es la política, así es la política… A los alemanes les interesa poner un tren a Lenin para que desestabilizara Rusia; a los iraníes les interesa que se difunda en América Latina y en España un discurso de izquierdas porque afecta a sus adversarios. ¿Lo aprovechamos o no lo aprovechamos? Para mí, quien haga política tiene que asumir cabalgar contradicciones, y nosotros estamos dispuestos a cabalgarlas.¿Son contradicciones? Por supuesto que sí. Las mujeres que trabajan en Hispan, que presentan programas, tienen que aparecer con un pañuelo que les rodea la cabeza. ¿A mí me gusta eso? No, no me gusta, no me gusta. ¿Eso es un motivo por el cual yo podría permitirme decir: «Ah, pues entonces no trabajamos en esta cadena»? No, creo que es más efectivo lo que estamos haciendo.En otra ocasión fue aún más claro, y tenebroso:La política es una cosa fea (…) Irán tiene una televisión que me ha contratado a mí… un Estado asesino de comunistas…Fort Apache es un programa de tertulia política dirigido por Iglesias y desde el cual se ha encumbrado a otros líderes de la formación morada, como Íñigo Errejón, Carolina Bescansa o Tania Sánchez. La línea editorial de Fort Apache, que suele llevar a tertulianos de todo el espectro político, comulga con lo que dijo Iglesias en la conferencia mencionada, «difundir un mensaje de izquierdas en América Latina que afecta a sus adversarios [de Irán]».Ya nos hicimos eco de esta filosofía política practicada por Iglesias, la de «el fin justifica los medios», en relación a las acusaciones de doble rasero de los Gobiernos europeos con Israel vertidas por Iglesias después de la operación Margen Protector en el verano de 2014, y ahí están los vídeos en YouTube, para aquel que quiera verlos; pero estas contradicciones no parecen haber sido de interés nacional; más aún cuando es el líder del tercer partido más votado.Cuando Pablo Iglesias se hizo famoso, se investigaron sus orígenes, y del anonimato, con libro y todo, salió Enrique Riobóo, director del Canal 33, donde se emitía La Tuerka, la tertulia política primigenia de Pablo Iglesias -ahora se emite en Público TV e Iglesias se encarga del espacio de entrevistas Otra Vuelta de Tuerka– y reveló la relación de Pablo Iglesias con Irán a través de Hispan TV, Global Media SL y Mahmud Alizadeh Azimi.Hilando un poco más fino, la relación entre Podemos e Irán se observa también en ciertas actitudes políticas. Mientras Podemos no ha tardado en criticar y denunciar las relaciones entre la Corona y Arabia Saudí -el mayor enemigo de Irán-, las denuncias sobre las violaciones de los derechos humanos en Irán, como la ejecución pública de homosexuales o la represión a los opositores políticos, han brillado por su ausencia.Podemos, por otro lado, se negó a unirse al pacto antiyihadista. Puede que sus reticencias no se debieran enteramente a su relación de mutuos intereses con Irán, sino también a la ideología del partido -esto es, ciertamente, un movimiento más difuso.No sabemos todavía a dónde va a llegar la investigación de la UDEF y no sabemos si las conclusiones indicarán que se ha producido el ilícito penal del artículo 7.2 de la Ley de Financiación de Partidos, que establece que los partidos españoles «no podrán aceptar ninguna forma de financiación por parte de Gobiernos y organismos, entidades o empresas públicas extranjeras o de empresas relacionadas directa o indirectamente con los mismos».Independientemente de ello, lo que es incuestionable es que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, estableció una alianza estratégica con Hispan TV, propiedad del Gobierno de Irán, para la consecución de varios objetivos, entre ellos uno que el mismo Iglesias definió: hacer política.Revista El Medio – España