El via crucis de Madonna: cómo la mujer de hielo se volvió humana

Madonna, durante su último concierto en Sidney.Una foto de un sombrero lanzado por los aires acompañada de la siguiente frase: “Siguiente capítulo: Todo el mundo es un escenario”. Con esta imagen publicada en su cuenta de Instagram, a modo de fiesta de graduación, Madonna ha dicho adiós definitivamente a la era Rebel Heart con un multitudinario concierto en Sidney.

Allí, rodeada de miles de seguidores que llevaban 23 años esperando a que les volviera a visitar en Australia, la cantante también ha dicho adiós a una de las épocas más polémicas de su carrera. Muy a su pesar, por cierto, ya que casi todo aquello que se le ha echado en cara durante estos seis meses que ha estado de gira no ha sido otra cosa que las consecuencias de haberse mostrado en el escenario ante su público, por primera vez, completamente vulnerable y sin corazas de ningún tipo.

Lástima que no todos los medios lo hayan entendido así y hayan preferido inventar noticias falsas para ganar audiencia antes que entender los motivos reales que llevaron a la Ciccone a hacer lo que hacía. Que errores ha cometido, y muchos, como salir de media más de una hora tarde en cada concierto o sobrexponerse en redes sociales.Pero no han sido esos fallos, sino estos que aquí recogemos, algunos de los bulos más denigrantes a los que ha tenido que enfrentarse la cantante durante los últimos meses. Mentiras interesadas que habrían acabado con la paciencia de cualquier otra artista menos experimentada pero que a la fría y calculadora reina del pop, al menos, le han servido para convertirse en humana.



MADONNA ESTÁ ACABADA

Este es uno de los mantras que más se ha repetido en la última década, y para ello los medios siempre han tirado de números: si de Confessions On A Dance Floor se estima que colocó más de 12 millones de copias en 2006; deRebel Heart, su último disco hasta la fecha, Madonna no ha llegado al millón de unidades vendidas.Visto así, es cierto que la cantante no atraviesa por su mejor momento. Pero tampoco artistas como U2, Bruce Springsteen o los Rolling Stones, que tienen cifras de venta similares e incluso menores y nadie los acusa de fracasados. Es más, Madonna ocupa el puesto 38 en la lista de los 40 músicos más vendidos de 2015, siendo la número uno Adele, con casi 15 millones; y la número dos Taylor Swift; con algo más de cuatro. Así que más que fracasada, digamos que los tiempos han cambiado y las cifras de hace una década, salvo contadas excepciones, simplemente son un milagro inalcanzable para cualquier artista.Además, Madonna ha tenido el mérito de alcanzar estas cifras de ventas a pesar de que su disco se filtró meses antes de su salida oficial. Un robo que obligó a su equipo a improvisar una campaña de lanzamiento en pleno diciembre de 2014 que hizo tirar a la basura todo el plan de marketing ideado meses atrás. Aunque tampoco importó demasiado, porque desde que firmara un contrato en exclusiva para realizar varias giras mundiales con LiveNation, la cantante ha enfocado todos sus esfuerzos en el directo, donde realmente está el negocio. Y ahí si que son muy pocos los artistas capaces de toserle.Pero ni en eso Madonna se ha salvado de las críticas. A pesar de que en poco más de cinco meses ha visitado cinco continentes para realizar 82 conciertos –y ninguno de ellos cancelados–, todavía hay medios como el Daily Mailque publican fotos de los recintos donde tocaba completamente vacíos horas antes de que empezara su actuación. Una manipulación constante que ha obligado a la cantante, la misma que nunca ha justificado nada de lo que ha hecho, a desmentir la información en su cuenta de Instagram publicando fotografías de los estadios completamente abarrotados. Las cifras de ventas le dan la razón. Según Billboard, en esta gira la cantante ha recaudado más de mil millones de dólares, solo superada por los Rolling Stones.

MADONNA ESTÁ MAYOR

Y eso es algo que también se viene diciendo desde hace más de una década. Ella, sin embargo, ha pasado del ‘ageism’ y a sus 57 años sigue bailando como pocas otras sobre el escenario, haciendo referencias al sexo y a la religión en sus números musicales y divirtiéndose en directo sin importarle lo más mínimo que, de nuevo los tabloides, y sobre todo las tertulianas de programas como The Talk dijeran que ya no tiene edad  para andar comportándose así, blasfemando y provocando, sin esperar consecuencias.De hecho, los hay que incluso han dicho que esta manera impropia de compotarle lo que más avergonzaba a su hijo Rocco y que por eso el adolescente se fue a vivir con su padre a Londres. De nuevo, una visión machista y simplista de los problemas personales de la artista, ya que nadie se ha atrevido a decir algo parecido de gente como los Rolling Stones, Bruce Springsteen o Paul McCarteney, a los que nadie acusa de ser demasiado viejos para tocar en estadios. Ser hombre y dedicarse al rock tiene estas ventajas.

MADONNA SE EMBORRACHA Y SE DROGA

Aprovechando su primera visita a Australia en 23 años, y coincidiendo precisamente con los problemas legales por la custodia de su hijo Rocco, Madonna decidió el pasado 10 de marzo dar un concierto especial gratis para sus fans en Melbourne. Se trataba de un espectáculo íntimo completamente distinto a su gira Rebel Heart al que Madonna llamó Tears Of A Clown (Lágrimas de un payaso). En él, la cantante apareció vestida de payaso y cantó sus baladas más tristes mientras hacía bromas sobre su vida, proyectaba fotos de su hijo rebelde y aparentaba beber algunos cócteles.

La idea detrás del espectáculo era la de hacer ver al mundo que en su profesión ella también es como un payaso, que debe seguir dando el espectáculo aunque esté triste por dentro. De ahí que se presentara sobre el escenario como ese personaje. Pero los medios, una vez más, prefirieron no informarse y se limitaron a contar y replicar noticias aparecidas en tabloides que aseguraban que la reina del pop había aparecido en directo ebria y drogada.

De nuevo, Madonna, la que nunca pide perdón, tuvo que desmentirlo en su cuenta de Instagram: “Gracias por apoyarme. Es una pena que la gente no reconozca el arte de la actuación y de interpretar un personaje. Nunca daría uno de mis conciertos borracha o drogada. Y sí, detrás de todo esto se esconde el sexismo y la misoginia, lo que demuestra que no solo no nos pagan igual [que a los hombres], además se nos trata como a herejes si nos salimos de las convenciones sociales y pensamos de otra forma. El sexismo sigue vivito y coleando, pero yo vivo para el amor”.

MADONNA ES INCAPAZ DE MANTENERSE EN PIE

En aquel mismo concierto, la cantante salió al escenario montada en un triciclo del que acabó cayéndose antes de empezar a cantar. Se trataba de un movimiento ensayado, pero los medios vieron ahí otra oportunidad para decir que Madonna ya no es tan ágil como antes y que estaría mucho mejor en su casa cuidando a sus hijos.

 Curiosamente esta era comenzó con otra sonada caída, esta vez en directo en los Brit Awards por culpa de una capa que no pudo desabrocharse a tiempo. Las mofas no tardaron en llegar haciendo bromas sobre si se habría roto la cadera cuando en realidad, con aquel traspiés, Madonna nos estaba dando un poderoso mensaje.

MADONNA CORROMPE A MENORES

Madonna nunca ha sido una diva conocida por ser demasiado cariñosa con sus seguidores. Pero algo ha cambiado en esta gira, donde ha apostado por dar un espectáculo íntimo en el que a veces solo estaban sobre el escenario ella, un ukelele y sus lágrimas por el drama del momento. Desnudaba así su alma la cantante antes de subir al escenario a un afortunado fan para que bailara con ella, que lo mismo era un amigo famoso como Jon Kortajarena en Barcelona, Amy Adams en Nueva York o Jessica Chastain en Praga –Kylie Minogue no aceptó su invitación para aparecer con ella en el escenario en Australia–; que un anónimo disfrazado de ella.

El problema es que en uno de sus últimos conciertos la Unapologetic Bitchescogida –llamada así en honor a la canción durante la que tenía lugar este momento– tenía 17 años. Algo que Madonna, evidentemente, no sabía.

Nada grave si no fuera porque con esa persona que sube al escenario Madonna simula practicar sexo, se besa o incluso la medio desnuda, algo que los medios utilizaron rápidamente para inventarse un escándalo de corrupción de menores inexistente después de que esta chica de 17 años mostrara uno de sus pechos. La muchacha, modelo de profesión, dijo enseguida que ella encantada. Y sus padres también. Pero la intoxicación ahí quedó para la historia, ideal para los que la acusan de ser mala madre por enseñar valores de dudosa moral.

MADONNA LLORA

Y no una, ni dos ni tres veces. En estos cinco meses la cantante ha dejado que la emoción entrara en escena y ha llorado sin pudor, tanto por los atentados de París –fue de las pocas que no suspendió sus conciertos cuando ocurrieron– como por su hijo Rocco, que se negó a volver con ella a pasar las Navidades. Una artista metódica, enemiga de la improvisación, obsesiva y mandona incapaz de contener las lágrimas en el escenario.¿Existe algo que humanice más a una estrella?

Fuente: www.revistavanityfair.es