Julia Ramos era parte del núcleo duro de dirigentes cercanos a Evo Morales. Ramos estuvo de inicio en el gabinete cuando el MAS llegó al poder. Fue de las de partida. Fue Ministra de Desarrollo Productivo. Ramos estuvo en la génesis del controvertido proyecto del Fondo Indígena de Bolivia, por el que ahora esta presa junto a otros exdirigentes y exautoridades acusados de malversación de millonarios recursos de la citada institución.
Las Bartolinas aseguran una fuente laboral para Ramos
GUSTAVO MÁRQUEZ / EL PAÍS EN / TARIJAEn estricta reserva se mantienen las diligencias que se realizan desde la Federación de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias “Bartolina Sisa” de Tarija, con el fin de ayudar a quien fue su líder y compañera, Julia Ramos, para que cumpla con las garantías procesales que le permitan eventualmente modificar su situación legal, pasando de una detención preventiva en La Paz a una detención domiciliaria en Tarija. Para ello se necesita que la dirigente cuente con un trabajo, que ya estaría asegurado.En diciembre de 2015, Ramos fue recluida en la cárcel de La Paz tras ser acusada de aprobar proyectos “fantasmas” cuando era miembro del directorio del Fondo Indígena. El 2 de febrero del 2016, el Juzgado Segundo Cautelar, rechazó la cesación de detención preventiva de la exministra, sobre quien pesan tres imputaciones, basándose en que la defensa de Ramos sólo acreditó domicilio y familia, no logrando comprobar que tenía un trabajo.A casi 10 meses de su detención y tras varias suspensiones de audiencias, Paul Gutiérrez, abogado de Ramos, informó que presentará un recurso de cesación a la detención preventiva de su defendida, y que ya se cuenta con una certificación de trabajo de Tarija, lo que sumado a los otros requisitos lograrían disminuir los riesgos procesales.Los detalles del puesto laboral que se ha procurado para la dirigente, se guardan con recelo. Fuentes del oficialismo apuntan que sería en una empresa privada, con un contrato avalado por el Ministerio de Trabajo.Si bien las Bartolinas evitan salir a la prensa sobre el tema, El País eN, consultó al respecto a Adriana Flores, fundadora del movimiento en Tarija, que ahora funge como secretaria de Desarrollo Productivo de la Confederación Nacional de Las Bartolinas. La dirigente pidió un tiempo para poder comentar la información requerida, afirmando que evidentemente se ha conseguido un trabajo, y que existe una retardación de justicia que está afectando a Ramos.Al respecto la diputada del Movimiento Al Socialismo (MAS), Sonia Condori, ante la consulta indicó que las gestiones por estrategia se mantendrán en reserva. Por su parte la dirigente de base de las Bartolinas, Felisa Cruz, agregó que en los próximos días se realizará una reunión, donde se tratará el tema.La presidente del MAS de Cercado, María Nélida Acuña, a tiempo de confirmar las diligencias, afirmó que se trata de una situación delicada: “Tiene ya trabajo en Tarija, no podemos dar más información. Se presentará a su audiencia… a todos nos duele y rezamos para que salga en libertad”, manifestó.Julia Ramos, el primer símbolo en caerJulia Ramos era más que la dirigente de las Bartolinas Sisa en Tarija. Fue casi una inspiradora del propio movimiento. Dirigente nacional, núcleo duro de las matrices que conformaron el Instrumento Político para la Soberanía Popular que se presentó a las elecciones del 97 con las siglas prestadas del Movimiento Al Socialismo.Julia Ramos era parte del núcleo duro de dirigentes cercanos a Evo Morales. Su último cinturón. Ramos estuvo de inicio en el gabinete cuando el MAS llegó al poder. Fue de las de partida. Fue Ministra de Desarrollo Productivo. Ramos estuvo en la génesis del controvertido proyecto del Fondo Indígena.No acabó la gestión, en algún momento se le requirió en el movimiento social. Dirigente nacional de las Bartolinas, empujó la Coordinadora Nacional del Cambio cuando más apretaba la lucha autonomista.Ramos se replegó después a Tarija cuando un Lino Condori desnortado asumía mediante triquiñuela la Gobernación de forma interina. Durante años estuvo cerca, mitad crítica mitad pedagoga, para que la gestión no acabara devorando al instrumento. Ramos incluso concedió que se entregar a Pablo Canedo, “enemigo de clase”, la posta como candidato del MAS en 2015.Ramos fue la primera en caer por el asunto del Fondo Indígena, acusada de malversar algunos proyectos. Desde su reclusión en La Paz señaló a Nemesia Achacollo, su sucesora en el ministerio y gestora durante los años del escándalo y que sin embargo no fue a declarar hasta julio de 2016. Achacollo ha ingresado en prisión. Ramos intenta salir. El escándalo aún no se ha aclarado.