Las moscas invisibles

Humberto Vacaflor Ganam 

Al observar los defectos de la globalización, Joseph Stiglitz menciona el caso de un acto de mala fe de Estados Unidos en el comercio con México. Dice que si no es con aranceles, Estados Unidos frena las importaciones con otro tipo de argumentos, cualquiera sea, como, por ejemplo, las moscas invisibles que acompañan a las paltas mexicanas (“aguacates” que al cruzar la frontera se llaman “avocado”).

Tipos muy serios discutiendo sobre unas moscas invisibles en solemnes salones de negociación bilateral. Stiglitz sonríe, sugiriendo que es un pretexto. “Porque son invisibles es que son más peligrosas y no deben pasar la frontera”, argumentaban los yanquis, dice Stiglitz. Si supiera que también en el caso de la uva hay moscas invisibles que, de pronto, aparecen como de milagro cuando estás manipulando un mosto. Es probable que haya una explicación científica sobre esto, pero por supuesto que los negociadores yanquis no la conocen.Hay que propiciar que en las negociaciones bilaterales se imponga siempre la honestidad para que haya confianza. Que no haya moscas invisibles en nada.Por ejemplo, un manejo honesto de las estadísticas debería aconsejar ahora al gobierno boliviano no aumentar los cocales, como ha decidido, sino disminuirlos. La razón: que Argentina está cerrando su frontera a la droga boliviana. Va a disminuir la demanda de droga boliviana, por lo menos de aquella que solía ir hacia Argentina.Dice Ernesto Justiniano, experto en la materia, que en Bolivia se producen 180 toneladas de pasta base. La DEA calcula que son 230. Para este cálculo excluimos la pasta que llega de Perú, que son 150 toneladas, según el diario La República de Lima.El principal mercado de la droga boliviana es Brasil, como es público y notorio. El segundo, igual que ocurre con el gas, es el mercado argentino. Si reduces la producción de gas cuando Brasil pide menores volúmenes, deberías disminuir la oferta de droga cuando Argentina cierra su frontera. Elemental. Aritmética simple, incluso para los que no se han titulado en México.Si estas negociaciones se hicieran abiertamente, sinceramente, el gobierno boliviano debería ofrecer que no irán a Argentina cargamentos de droga ni siquiera a bordo de avionetas invisibles. Entonces, como miembros del Mercosur, los dos países podrían incluir este rubro en el comercio bilateral.La sinceridad es lo que vale.Fuente: Vacaflor.obolog.com