Vecinos de El Alto dijeron a Página Siete que es un atractivo turístico y se ahorra tiempo.
Un alteño observa por primera vez desde el aire la feria 16 de Julio a través de una cabina.En el segundo fin de semana abierta al público, la línea Azul del teleférico congregó a miles de personas que formaron largas filas en la primera y última estación, de las cuatro que comprenden su ruta. Los pasajeros de El Alto manifestaron que utilizarán este medio de transporte para ir a la feria 16 de Julio y para pasear.»Creo que esto es solamente para turismo o en nuestro caso para ir a la feria (16 de Julio) porque, después, el uso diario nos afectaría los bolsillos. Creo que es como un juguete nuevo en el que queremos pasear”, comentó Carlos Condori.La vecina de San Roque Rocío Landaeta comentó que solamente utilizará el transporte los fines de semana para llegar a la feria 16 de Julio y evitar el tráfico vehicular que es impredecible los fines de semana.»A mí me sirve para llegar a la feria, pero los demás días me conviene tomar un transporte directo a la Ceja o a cualquier dirección a la que me dirija”, aseveró.La línea Azul constituye el recorrido más largo de todas las líneas de Mi Teleférico, 4,9 kilómetros, y el costo por recorrido es de tres bolivianos. «Yo lo usaré en emergencias y si debo evitar el tráfico o para llegar a la feria”, comentó Lilian Paucara.Este transporte moderno lleva por el aire a pasajeros mientras que debajo de ellos se extiende una alfombra de toldos de vivos colores. Dentro de ellos se comercializan todos los productos imaginables, desde automóviles hasta bufandas, productos que en una buena parte son usados.Y es precisamente para llegar a la feria 16 de Julio que Consuelo Tarqui y Yolanda Mamani se levantaron muy temprano, debían hacer varias compras. Llegaron alrededor de las 6:30 y se sorprendieron al encontrar la estación de la extranca Río Seco cerrada.»No sabíamos que domingo abren recién a las 7:00, había algunas personas protestando cuando llegamos. Muchos que trabajan en al feria y otros que tienen que comprar tienen que estar ahí a las 5:00 y eso debería considerar Mi Teleférico, además porque el retorno muchos lo hacen en minibús ya que no se puede subir con las compras a las cabinas”, reclamó Tarqui.La línea Azul funciona de lunes a sábado de 6:00 a 23:00 y los domingos de 7:00 a 21:00. En el primer fin de semana de funcionamiento 41.000 personas utilizaron este medio de transporte.La experiencia de viajar en las cabinas de la línea Azul supera lo visual -que incluye nevados como el Huayna Potosí hasta observar el despegue y aterrizaje de aviones en el Aeropuerto Internacional de El Alto- para convertirse en multisensorial.La música «chicha” y tropical que suena a todo volumen en la feria 16 de Julio invade sin reparos las cabinas, así como el olor de la comida que se prepara en los puestos. Si una persona no planificó almorzar chicharrón de cerdo, es probable que tenga ganas de comerlo al llegar a la estación de destino.Los usuarios comentaron que en un día normal de la Ceja a la extranca de Río Seco les puede tomar alrededor de media hora, tiempo que se extiende los días de feria debido al congestionamiento vehicular.»Hemos venido hoy con la familia para pasear porque es fin de semana, nosotros vivimos en Ciudad Satélite y esta línea no pasa cerca de la casa. Estamos aprovechando el tiempo para ver la feria 16 de Julio, pero ahora volando sobre ella”, comentó Juana Acarapi.Precio vs. TiempoLos consultados por Página Siete coincidieron en que el precio es un impedimento para que se transporten en la línea Azul del teleférico. Señalaron que quienes no viven cerca de las estaciones deben pagar entre 1,50 y dos bolivianos para llegar. A eso se suman los tres bolivianos por el servicio y otros tres en la línea Roja si se tienen que llegar a La Paz o dos bolivianos si optan por el minibús.»Nos sale un promedio de siete bolivianos, pero si tomamos dos minibuses para llegar a destino, nos sale alrededor de 4,50 bolivianos. Por eso no nos conviene”, manifestó Carlos Condori.Por su parte, Carlos Beltrán, vecino de La Paz, dijo que es una forma práctica para recorrer El Alto porque gana tiempo. «Con este transporte evitamos las ‘trancaderas’ y eso es ganacia”, sostuvo.
Fuente: Página Siete / Alejandra Pau / El Alto