Evo endurece su crítica a Trump y reta a no exigir visas a bolivianos

Morales arremetió contra el presidentes de EEUU y le pidió que él primero exima el visado a los bolivianos. La relación con Washington está congelada, pero la Cancillería boliviana negocia para mejorarla

Iván Paredes Tamayo



Reunió datos y arremetió contra Estados Unidos en dos eventos públicos ayer. El presidente Evo Morales endureció su discurso político contra Washington, mientras en la Cancillería se avanzó en retomar la relación diplomática. El mandatario, además, exigió a la Casa Blanca reciprocidad al expresar su apertura y anular el visado para ciudadanos estadounidenses si es que la administración de Donald Trump ejecuta similar acción a favor de los bolivianos. 

La Cancillería boliviana avanzó -en algo- en normalizar las relaciones diplomáticas con Estados Unidos. Hace tres meses, sus salones recibieron la visita de una persona estadounidense de alto nivel. Era Michael Fitzpatrick, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Washington, quien se reunió con autoridades diplomáticas bolivianas y producto de esos encuentros se instalaron mesas de trabajo. La más importante es la referente a la relación comercial y ninguna respecto al narcotráfico. 

Esa negociación avanza lentamente y mientras eso sucede Evo Morales va a su estilo. Muchas veces señaló que es mejor no tener un embajador de Estados Unidos en La Paz y llegó al extremo de decir que no le interesa retomar las relaciones. 

David Choquehuanca, excanciller de Evo y antecesor del actual, Fernando Huanacuni, siempre exigió a Washington como requisito único para normalizar relaciones que haya respeto mutuo y anular la supuesta injerencia política norteamericana. Un día antes de abandonar el gabinete ministerial decía que se avanzó, pero no al punto de llegar al intercambio de embajadores. 

Ayer, Morales acusó a Estados Unidos de imponer modelos políticos en Latinoamérica y pidió a Trump que se disculpe por los “golpes de Estado” en la región. “Si habla de democracia, primero que se disculpe”. 

Por la mañana manifestó un discurso más amable. Al conocer la posición del encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos en La Paz, Peter Brennan, que pidió al Gobierno de Bolivia eximir el requisito de visas para ciudadanos estadounidenses, el jefe de Estado expresó su apertura a revisar ese aspecto, pero pidió reciprocidad para los bolivianos.     

La posición de Evo“Nosotros eliminamos el visado para los norteamericanos y ellos que también eliminen el visado para los bolivianos. Ahora tenemos dignidad, ahora tenemos soberanía, decía Morales en un acto en el municipio de Filadelfia, en Pando. 

Luego, a través de su cuenta Twitter, calificó como una “trampa” de Donald Trump el exigir la exención de visas a favor de estadounidenses. “De día EEUU pide diálogo, visas e integración. De noche levanta muros de exclusión y alienta la conspiración. Bolivia es digna y se respeta” (sic), fue el segundo mensaje de Morales. Ante esa posición se alineó su militancia. La senadora Nélida Sifuentes fue directa: “Si ellos (EEUU) quieren ingresar sin visa (a Bolivia), pues también que levanten sus visas para nosotros (bolivianos)”. El diputado oficialista Víctor Borda señaló que Washington, incluso, investiga a las personas que van a ingresar a su territorio. “Ese extremo debían analizar antes de pedir que les eliminemos el pedido de visa”, sentenció el legislador. La oposición tiene una posición más cauta. La diputada Norma Piérola señaló que la solicitud de visas a estadounidenses -aplicado desde 2007- fue una “maniobra” política del Gobierno de Morales “al fiel estilo de la dictadura venezolana y cubana”.  Bolivia tiene el ingreso sin visado a los países del Mercado del Sur (Mercosur) y de la Comunidad Andina de Naciones (CAN); sin embargo, debe tramitar la visa para entrar a la Unión Europea (UE), aspecto que no es recíproco, ya que europeos pueden ingresar a suelo boliviano sin visas. Lo mismo ocurre con China.   Por la tarde, Morales culpó a Washington de impulsar un supuesto golpe de Estado contra Nicolás Maduro, presidente venezolano. Evo Morales recriminó así a Estados Unidos una vez más, mientras que en la Cancillería intentan normalizar la relación, que está deteriorada desde 2008 cuando se expulsaron embajadores. 

Fuente: eldeber.com.bo