Pando. Tras ataque a policía revelan amenaza de jefe narcotraficante

Policías de Bolivia y Brasil han salido a la caza de los autores. Hubo 9 detenidos pero la víctima los descartó.El cabo Churqui se restablece y tiene el apoyo de sus camaradasEl Deber / Ruy D’AlencarTras el ataque armado del 6 de agosto contra el cabo Juan Carlos Churqui en Cobija, que estaba desarmado y solo en el puesto fronterizo Puerto Alto, ayer el servicio de Inteligencia de la Policía en Pando reveló a EL DEBER que todo puede ser consecuencia de un operativo en Cobija la noche del 20 de julio, cuando Luan Silva Santos (27) y Jorge Pisco Da Silva (44) ambos brasileños, cayeron presos en el hotel Sol Amazónico por portación ilegal de armas y asociación delictuosa.Esa noche, gracias a la cooperación con la Policía Militar del Estado de Acre, se averiguó el prontuario criminal de ambos en Brasil. Silva Santos tenía cuentas pendientes en su país por homicidio y Pisco Da Silva es uno de los jefes fundadores de la Banda de los 13 (B-13), facción que responde al cártel del PCC, que se dedica al tráfico de drogas y armas, a los atracos y secuestros.Días después, ambos sujetos fueron entregados a las autoridades brasileñas. “Luego, la Policía brasileña nos alertó de que Jorge había determinado que sus ‘soldados’ atacaran a nuestros policías, a cualquiera, como represalia”, narra el capitán Orlando Montaño, jefe de la Felcc de Pando.Para él, esta amenaza del jefe del B-13 da vida a una fuerte hipótesis que no se puede descartar para explicar el ataque del domingo contra el cabo Churqui, que fue tiroteado por tres jóvenes brasileños que huyeron por el río sin llevarse la tablet que había en el puesto policial ni el vehículo particular que Churqui tenía estacionado.Por lo pronto, Montaño explicó que los policías de ambos países han organizado distintas redadas y han capturado a nueve sospechosos, pero la víctima ya descartó a todos ellos.