El agua contaminada sigue acumulándose a razón de 150 toneladas al día y en caso de producirse un nuevo terremoto o tsunami, esta podría derramarse de manera descontrolada.
#Radioactive water dump: Another nail in the coffin of #Pacific Ocean. Don’t eat Pacific seafood.https://t.co/zk9qNtv450
— Jewel Jname (@jeweljnamecom) 27 ноября 2017 г.
¿Un plan seguro?
Ante esta posibilidad, los expertos aconsejan liberar estos depósitos de agua de manera gradual al considerar que el tratamiento que recibe este líquido elimina todo el material radiactivo peligroso. El único residuo presente en el agua es el tritio, un isótopo natural de hidrógeno, cuyo nivel no constituye una amenaza para el medio ambiente, insisten los especialistas.Este plan implica diluir hasta 50 veces el contenido de los tanques con agua pura y arrojar diariamente unas 400 toneladas al océano, respetando de esta manera las normas permitidas en otras plantas nucleares.
Rechazo de la comunidad
Sin embargo, estas medidas han generado un fuerte rechazo en la comunidad de pescadores locales. A pesar de los análisis que muestran que el pescado obtenido en la zona es un alimento seguro, los consumidores siguen desconfiando de estos productos.En caso de liberar el agua de los contenedores al océano, «nuestro esfuerzo por recuperarnos se desmoronaría» de inmediato, expresó Yuichi Manome, uno de los mariscadores de la zona.Fuente: actualidad.rt.com