Casi 5.000 efectivos de 18 países despliegan un amplio operativo que aún no ha logrado resultados
Despliegue sobre un área de casi medio millón de Km2
No existen antecedentes en Argentina de un operativo tan amplio, desplegado sobre un área de 482.507 Km2 (poco menos de la superficie de España), con una longitud de casi 1.000 Km y en un radio de otros 1.000 desde el continente, entre la ciudad de Mar del Plata y el Golfo San Jorge. A fines de noviembre, la búsqueda se redujo a 40 kilómetros de radio, aproximadamente 20 veces la superficie de la Ciudad de Buenos Aires y seis veces el área metropolitana de Madrid.
CÓMO ES EL ARA SAN JUAN
Los rastrillajes transitaron muchas veces entre el ensayo y el error —algo que también fue reconocido por Aguad—, y estuvo contaminada por informaciones erróneas que entorpecieron la comunicación oficial, siempre a cargo del portavoz de la Armada, Enrique Balbi.El último contacto del ARA San Juan, el único submarino de este tipo que la Armada Argentina tenía en condiciones de operar, fue el miércoles 15 de noviembre a las 7.30 de la mañana, 10 días después de zarpar del puerto de Ushuaia, en dirección Mar del Plata. Allí es donde la nave debía emprender la vuelta en caso de inconvenientes, según lo que dicta el protocolo militar. En esa base naval fueron alojados los familiares de los tripulantes, que montaron un santuario con banderas argentinas y pancartas de homenaje.
Aviones y embarcaciones de 18 países y apoyo de la NASA
Las dificultades que se presentaron en altamar, la compleja geografía submarina del área en cuestión —con profundidades que superan los 1.000 metros— y la trascendencia internacional de la búsqueda motivaron la colaboración de fuerzas más acostumbradas a estos infortunios, que se pusieron sin reparos bajo la coordinación de los altos mandos locales, hasta el 30 de noviembre, cuando la Armada dio por finalizada la búsqueda “bajo la jurisdicción argentina”. Así, los siete aviones y las 18 embarcaciones del país recibieron el apoyo de un sofisticado instrumental aportado por otras naciones y hasta por la agencia espacial NASA, que operó en la búsqueda con dos aviones.
VEHÍCULO SUBACUÁTICO
Entre los equipos más modernos están el buque Yantar, que permite rastrillar 6.000 metros bajo el agua y el vehículo robotizado Panther Plus, ambos aportados por el Gobierno ruso; también el buque oceanográfico Atlantis de Estados Unidos. Estos últimos detectaron hace pocos días una presencia a 700 metros de profundidad, aunque con resultados negativos. El buque argentino Víctor Angelescu también halló un casco a más de 400 metros de profundidad hace una semana, pero el Panther Plus confirmó que se trataba de un viejo pesquero hundido.
MINISUBMARINO
Los responsables del rescate buscan al ARA San Juan con sonares, equipos que emiten y recepcionan haces acústicos que se desplazan por la columna de agua y retornan a la sonda en forma de imágenes acústicas. “Como si se dibujara el fondo del mar”, explicó Alejandro Tassone, investigador del Conicet. El especialista detalló que la nave debe ir a una velocidad de navegación de cinco nudos, es decir, unos 10 kilómetros por hora. Un proceso demasiado lento para zonas y aguas tan profundas.Fuente: elpais.com