Policía alerta sobre dos nuevos modus operandi de los ladrones en La Paz

Unos usan como señuelo a mujeres jóvenes  y otros hacen pasar por mendigos a uno de sus miembros para identificar a quienes tienen dinero.

FELCC alerta sobre dos nuevos modus operandi de los ladrones en La Paz

Una de las formas de robar en las calles y a plena luz del día es el uso de un señuelo que es un presunto mendigo, quien observa a los transeúntes para detectar al que tiene objetos de valor o dinero, en monederos y billeteras.

Modus operandi de las bandas.
Modus operandi de las bandas. Foto: Oswaldo Aguirre

La Policía detectó dos nuevos modus operandi de las bandas que operan en la ciudad de La Paz. Unas usan como señuelo a mujeres jóvenes  y otras hacen pasar por mendigos a uno de sus miembros para identificar a quienes tienen dinero.



Los antisociales —que tienen  sus territorios— buscan nuevas formas de delinquir, con el objetivo de “atrapar”  víctimas, informó la Dirección Departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz.

El 15 de mayo, el coronel Jhonny Aguilera, jefe de esa unidad policial, presentó  a Joyci R. P., de 21 años, quien junto a cuatro individuos actuaban cerca del mercado Yungas, en Miraflores.

Habían pasado las 23.00 cuando la joven “se acercó a un hombre, le dio charla y se ganó su confianza, luego le pidió que la acompañara al baño, fueron por una calle paralela al mercado Yungas y allí cuatro sujetos lo agarraron, golpearon y le sustrajeron su teléfono móvil, su billetera y otros objetos de valor”.

Según el jefe policial, el rol de las mujeres en este tipo de delitos es el de distraer a la víctima y hacer que baje la guardia.

“No están en las facultades de cometer el delito como tal, ya que hay que golpear, entonces se convierten en anzuelos”.

Al menos tres hombres más fueron víctimas de atraco en este sector con el mismo modus operandi, según las denuncias que recibió la FELCC. “Tenemos esos datos por la georreferenciación de las denuncias”.

Aguilera sostuvo que hay más casos, los que no se denuncian por vergüenza o el temor de tener problemas en sus hogares.

Otra nueva forma de robar en las calles y a plena luz del día es que aquellos cuyo señuelo es un presunto mendigo, que observa a los transeúntes para detectar al que tiene objetos de valor o dinero, en monederos y billeteras.

“Los delincuentes, piden limosna, quién se para cerca de ellos (para darle unas monedas), exhibe sus pertenencias de alguna manera; los ladrones hacen una rápida lectura de lo que uno lleva encima, da la señal y de pronto están encima sus cómplices”.

Espere…

A media mañana del domingo 13 de mayo, un hombre transitaba por el túnel de la Plaza Mayor de San Francisco cuando una persona se le acercó pidiéndole limosna, él sacó una moneda y se la entregó, unos cinco pasos más allá, tres hombres lo interceptaron y le robaron su celular y otros objetos. Según el jefe de la División Delitos Contra la Propiedad de la FELCC, mayor Juan José Millán, de los cuatro sujetos dos fueron capturados.

“Tienen antecedentes penales y fueron enviados ante la Fiscalía por robo agravado”.

El subdirector de la FELCC de El Alto, coronel Freddy Medinacelli, explicó que los delincuentes identifican primero a sus posibles víctimas y hacen una selección de cuatro o cinco por si no pueden consumar el robo.

Una vez identificada, le hacen un seguimiento, cualquiera que sea su modus operandi, y en una tercera etapa ejecutan el plan.

“Esto tiene que ver con hablar, beber juntos, reír, dar confianza a la víctima e incluso contarle cosas propias, inventadas, con el fin de no despertar sospechas”.

Los delincuentes usan diversas formas para que sus víctimas caigan en la red. La Razón realizó un seguimiento a delincuentes en la Ceja de El Alto y se pudo observar que un sujeto fingía estar ebrio para ir detrás de alguien e intentar robarle, cuando no lo conseguía, retornaba caminando normalmente hasta su punto de partida a esperar a otra persona.

Una mujer llegó acompañada de un sujeto hasta el reloj en la Ceja, parecían una pareja de enamorados, hasta que se acercaron al menos cuatro sujetos y redujeron al hombre, le quitaron su maletín y su chamarra. Los asaltantes también atraparon a la mujer y mientras el varón huía, ella se unió al grupo y comenzaron a reír.

Andrés Pinedo, abogado penalista, dijo haber conocido varios modus operandi que usan los delincuentes que incluso se valen de niños y bebés con el fin de cometer sus atracos.

Aguilera agregó que la gente, a pesar de que algunas artimañas de los asaltantes son viejas, siguen cayendo en el anzuelo.

La Razón / Miguel Rivas / La Paz