La Alcaldía de Cochabamba tiene la mayor cantidad de adjudicaciones (105); pero la que más invirtió es El Alto, con Bs 24,9 millones en 12 contratos. Según la FAM, la inversión real de los municipios es mucho mayor.
Las alcaldías deben dotar de insumos a los hospitales y a la población.
Fuente: Página Siete
Leny Chuquimia / La Paz
De marzo a julio, 141 municipios del país invirtieron 185.806.041 bolivianos en la atención de la emergencia por Covid-19 mediante 1.357 adjudicaciones. Gran parte de los contratos se hicieron bajo la Normas Básica del Sistema de Administración de Bienes y Servicios (NB.SABS) y solo siete se basaron en el Decreto Supremo 4174, que autoriza las compras directas excepcionales.
Las cifras corresponden a la iniciativa #Datactivate que liberó una base de datos con 10.109 procesos municipales de contratación que fueron publicados en el Sicoes entre marzo y agosto. De ese total, 2.582 están referidos a la lucha contra el coronavirus y fueron realizados por 193 municipios de los 340 del país.
Esta investigación logró acceder a 1.357 contratos de 141 municipios que consignan los montos de las compras realizadas para la emergencia (ver infografía). El resto de las alcaldías no tiene convocatorias abiertas en el Sicoes.
“No hemos revisado cuáles son los municipios que suben los contratos al Sicoes, pero los que no están registrados es porque realizan contrataciones directas, cuyos procesos deben entregarse a la Contraloría, porque todos están trabajando para atender la emergencia. Esta instancia seguro tiene más contratos y mostrará que hay una inversión mucho mayor en todos los municipios”, dijo el presidente de la Federación de Asociaciones Municipales de Bolivia (FAM), Álvaro Ruiz.
El exalcalde de La Paz Juan Del Granado -quien enfrentó una de las emergencias más grandes del país, la riada de 2002- señala que es difícil saber la cantidad de contratos y los montos invertidos por las alcaldías en esta pandemia. Apunta que de los 340 municipios del país, no todos están en el mismo rango de riesgo, por lo que las acciones que asumen también son diferentes.
“Creo que tiene que ver mucho con la gran cantidad de municipios, especialmente rurales, que están en riesgo bajo, por lo que no tienen grandes urgencias. Por otro lado, hay también una institucionalidad muy poco preparada para asumir los riesgos y, por tanto, activar los mecanismos como las declaratorias y contrataciones de emergencia, además de la adecuación de toda la estructura municipal para la atención de riesgos”, explicó.
Del Granado sostuvo que tras la riada de 2002 La Paz se convirtió en uno de los municipios más preparados para responder a una emergencia de tipo geológico. Esto ayuda -dijo- a que ahora se tomen medidas acertadas.
Qué dicen los datos
El 61% de los contratos fueron hechos por la modalidad de excepción, de ellos, el 33,5% fue para la adquisición de bienes. El 79,8% de esos procesos ya fue adjudicado.
Los objetos de contratación van desde la impresión de recetarios y alimentos hasta la compra de equipos médicos e insumos de limpieza y de laboratorios para diagnóstico. Termómetros, barbijos, ecógrafos, mobiliario para habilitar camas en los hospitales o centros de aislamiento son solo algunos de los ítems.
Según los datos de las contrataciones, a nivel departamental, las alcaldías paceñas fueron las que más invirtieron con un total de 50,5 millones de bolivianos. Le siguen los municipios cochabambinos con 50,5 millones adjudicados y los tarijeños con 25,63 millones.
A nivel de capitales más El Alto, los contratos contabilizados llegan a 314 de nueve ciudades. Cobija no registra convocatorias, pero sí lo hacen otros municipios del departamento de Pando.
Estos contratos en total significan una inversión de 70,7 millones de bolivianos. Con 105 procesos, la Alcaldía de Cochabamba es la que tiene mayor cantidad de adjudicaciones; pero la que más invirtió en esta muestra es la comuna de El Alto, con 24,9 millones de bolivianos en 12 contratos. Sus compras por montos más fuertes corresponden a equipos médicos y alimentos para apoyo a la población y personal policial.
La norma
Pese a decreto que declara la emergencia y autoriza las compras directas para su atención, solo el 0,83 % de las contrataciones se realizó bajo esa normativa.
“Hay desconocimiento en algunos municipios y esto puede generar temor. Tomará su tiempo hasta que los técnicos encargados conozcan la norma”, señaló Ruiz.
“En situación de emergencia es cierto que hay recelo por estas contrataciones, porque se puede incurrir en errores por un proceso mal hecho o porque a veces se abre las puertas a la corrupción”, explicó Del Granado.
Punto de vista
Juan del Granado,exalcalde de La Paz
“Estamos ante el desafío de reformular visiones”
El 2002, la tragedia de febrero (la riada) nos condujo a una reformulación completa de la Alcaldía de La Paz, no solo del POA, sino del plan de desarrollo municipal. Tuvimos que adecuar, absolutamente, toda la planificación estratégica y de la propia estructura institucional para el gran desafío que planteaba la emergencia.
En la pandemia, creo que el país -los municipios y los gobiernos subnacionales y el central- están frente al desafío de reformular sus visiones de corto (que se está haciendo ya), mediano y largo plazo para adecuar las estructuras nacionales a esta situación no prevista que se mantendrá por mucho tiempo y que puede reproducirse hacia adelante.
La pandemia, nos dicen los expertos, nos va acompañar un par de años. Se prevé que haya otras emergencias similares y que éste no sea un fenómeno aislado.
La pandemia nos encontró, al país en su conjunto y a los municipios en particular, con una absoluta falta de preparación ante el drama de la salud pública.
En La Paz desde mi gestión invertimos mucho en los centros de salud, en los hospitales de segundo nivel y entonces también en los del tercer nivel. Pero resulta que todo ese esfuerzo -continuado por el alcalde Luis Revilla- no fue suficiente.
El colapso hospitalario y sanitario, la falta de laboratorios, insumos y medicamentos nos muestran que se debe reformular la visión institucional municipal, especialmente en el área de salud; pero también en educación y cultura ciudadana. Hay que reformular recursos, presupuestos y las estrategias de corto, mediano y largo plazo.
Recursos y apoyo para los municipios
- DS 4205 En su disposición final segunda establece que en el marco de la emergencia sanitaria nacional y de manera excepcional -únicamente para la gestión 2020- las entidades del sector público de todos los niveles del Estado podrán realizar las modificaciones presupuestarias que consideren necesarias.
- Fondo El 8 de junio el ministro de Economía y Finanzas Públicas, José Luis Parada, y representantes de la Federación de Asociaciones Municipales de Bolivia (FAM) acordaron la creación de dos Fondos Solidarios Compensatorios Covid-19.
- Situación “En los últimos meses los municipios hemos reducido mucho nuestros ingresos. Teníamos un presupuesto y ese sólo se está cumpliendo en un 60%, por eso luchamos por la reasignación del 12% del IDH, gracias a la Asamblea Plurinacional se logró una norma”, dijo el presidente de la FAM, Álvaro Ruiz. Añadió que ese dinero se destinó a personal, pruebas y medicamentos.
- Compras Ruiz explicó que aunque los municipios quieren hacer compras, no las pueden realizar por la escasez de insumos, sobre todo en medicamentos, reactivos y pruebas. “Eso es un punto importante que debe ser solucionado para que se tome medidas a tiempo”, recalcó.
- IDH El 29 de junio se promulgó la Ley 1307, que instruye la devolución a los gobiernos subnacionales y universidades de hasta 200 millones de dólares del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), que les fue quitado desde 2015.
- Alcaldes Ruiz afirmó que a partir que el Gobierno central dejó solos a los municipios y que éstos tomaron las medidas “más oportunas y acertadas”. Recordó que ya son cuatro los alcaldes que fallecieron víctimas de Covid-19 y que hay más de 20 contagiados. “No hay municipios que no estén trabajando o que no estén haciendo inversión. Hay que diferenciar el presupuesto y las transferencias reales que hace el Gobierno. Hay que ajustar”.
Los datos abiertos
- DatActivate La falta de información y datos de las compras realizadas para combatir la emergencia en Bolivia provocó malestar y reclamos contra el Gobierno central y entidades subnacionales, en demanda de mayor transparencia.
- Equipo Esto alentó la realización del #DatactívateEnCasa, en la que por 46 horas más de 60 profesionales de diferentes perfiles (analistas de datos diseñadores, periodistas, informáticos, entre otros) crearon colectivamente un espacio digital para reunir la información de compras Covid-19 en Bolivia.