Militares liberan al derrocado presidente de Malí

Fuente: infobae.com

El expresidente de Malí, Ibrahim Boubacar Keita, fue liberado este jueves por la junta militar que lo depuso la semana pasada, tras siete años en el poder en este país en guerra contra los yihadistas, anunciaron los militares.



«El presidente IBK está libre de movimientos, está en su casa», declaró a la AFP el capitán Djibrila Maiga, portavoz de la junta.

El Comité Nacional para la Salvación del Pueblo (CNSP), creado por los militares para dirigir el país, «informa a la opinión pública nacional e internacional que el expresidente Ibrahim Boubakar Keita fue liberado y se encuentra actualmente en su residencia», anunció en Facebook.

Un miembro de su familia indicó, bajo anonimato, que Keita regresó en la noche a su residencia en el barrio de Sebenikoro.

Keita, de 75 años y quien llegó al poder en 2013, fue detenido con otros altos dirigentes durante el golpe de Estado que ejecutaron el 18 de agosto los militares tras dos meses de crispación política.

Por su parte, el hijo de Keita, Karim Keita, una de las personalidades en las que se concentró la protesta contra el poder de su padre, se refugió en un país vecino, informaron el jueves fuentes diplomáticas y de su entorno.

Visto por muchos como una de las figuras que encarnaba la corrupción del régimen, Karim escapó a las detenciones y no se tenía noticias oficiales de él desde entonces.

Temiendo por su seguridad, Karim, elegido diputado en 2013 y reelegido en 2020, «abandonó Malí por carretera hace dos días», dijo el jueves a la AFP un diputado considerado muy cercano a él.

«Me ha llamado. Está bien», añadió esta fuente bajo anonimato, insinuando que podría encontrarse en Burkina Faso o en Costa de Marfil.

Una fuente diplomática africana indicó por su parte a la AFP que «Karim Keita está actualmente en un país vecino de Malí», sin dar más detalles.

Ibrahim Boubacar Keita, llamado por los malienses con las siglas «IBK», fue señalado por muchos como responsable de la grave crisis de seguridad, política y económica que hunde a su país desde hace años. La noche del golpe anunció su renuncia, afirmando que no tenía otra opción para evitar un derramamiento de sangre.