¿Se vestirá de mujer el rectorado de la UAGRM?

De la pandemia a procesos electorales. Ese será el ritmo en que nos desenvolveremos por un buen tiempo. Actos democráticos que perfilarán nuevos rumbos para el país, los gobiernos locales, para universidades públicas y muchas otras instituciones sindicales y corporativas.

Mientras más la ciudadanía ejerce su derecho a elegir y ser elegido, la democracia se fortalece. Pero no solo debe tener esa tónica, sino que el derecho de la elección tiene que alimentar a la vez liderazgos, propuestas y transformaciones en las entidades respectivas.



Una de las elecciones que serán determinantes para retomar el rol protagónico que siempre tuvo la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, serán precisamente en esta importante institución de educación superior. Con la pandemia, los mandatos se extendieron de todas las autoridades electas de la UAGRM, pero ya están a punto de bajar la bandera para que los candidatos inicien sus respectivas campañas electorales.

Es recomendable y altamente polémico hablar de la UAGRM, que en los últimos tiempos no ha tenido un rol gravitante, aportando a la sociedad y a las instituciones, en diferentes temáticas, no obstante las condiciones adecuadas, como el hecho de contar con profesionales de nivel, con una amplia infraestructura educativa, con años de prestigio e historia y con un estudiantado de más de 100.000 universitarios morenianos.

La Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, fundada el 11 de enero de 1880, y según el ranking Webometrics, es considerada la tercera mejor universidad de Bolivia. Son 140 años de una intensa trayectoria, que ahora encarará un proceso electoral para renovar todas las instancias superiores: rectorado, vicerrectorado, decanos, vicedecanos, directores, cargos electivos importantes, y que a la vez debe estar en poder de gente capaz, responsable, honestas y competitivas.

Pero en esta trayectoria de la UAGRM hay un elemento central que sobresale de forma notoria. Desde su fundación han pasado más de 25 rectores y vicerrectores. Todos ellos hombres, ni una sola mujer tuvo el honor de estar en los principales cargos. ¿Por qué? ¿Es la universidad machista?

Las respuestas son varias o quizás no haya la más pertinente. El sociólogo José Martínez, nos ayuda a entender este fenómeno: “No tiene que ver con que la UAGRM sea una institución machista, sino que estamos en una sociedad patriarcal, y la universidad es su mayor reflejo”. Martínez lanza la polémica: “Han existido y existen candidatas mujeres que aspiran a las máximas instancias de la universidad, no tienen ni tendrán éxito, porque no plantean nada diferente a los candidatos varones, enfeudados en el prebendalismo, las camarillas y la corrupción”.

Daniel Valverde, director del Observatorio Político Nacional, explica que la ausencia de una mujer como rectora o vicerrectora es común en todas las universidades públicas. “No conozco una rectora en Bolivia elegida por voto. Son mezcla de los resabios de estructuras machistas hegemónicas en las instituciones incluidas las universidades. Hace 20 años las mujeres eran minoría recién desde hace 5 años hay equidad en la matrícula y por otra parte debido a que las mujeres, salvando excepciones, no se animaron a presentarse con firmeza y con un proyecto persistente. También es importante que un proyecto encabezado por una mujer sea lucido e intérprete la realidad”.

Sin duda, un tema demasiado espinoso, que la misma Universidad debería plantearlo en su interior, tomando en cuenta que la matrícula se ha feminizado en los últimos tiempos. En la actualidad, el 70% de la matrícula corresponde a las mujeres. “Eso no garantiza que las mujeres estudiantes mayoritariamente votarán por mujeres candidatas, nada de eso ocurrirá, porque las mujeres todavía piensan con la cabeza patriarcal que las educó”, remata Martínez.

En estos tiempos de empoderamientos, de nuevos paradigmas, de grandes retos y de nuevos liderazgos, así como en el mundo está ocurriendo, con la enorme importancia de las mujeres en sus procesos de reivindicación, algunas mujeres decidieron romper con ese muro que les impide llegar hasta el rectorado o vicerrectorado de la UAGRM.

Los candidatos de la UAGRM ya están en carrera, aunque ahora la campaña electoral será diferente. Con seguridad no habrá los fiestones que se acostumbraba a realizar, en la que se repartía cervezas a granel, con musicones, rifas de electrodomésticos, bonos, etc. Es así que los candidatos están haciendo uso de las redes sociales, de una campaña más personalizada y con más propuestas. Indudablemente gastarán mucho menos que en las anteriores campañas, que fueron millonarias.

Dos  mujeres quieren llegar a la máxima instancia moreniana. María Angélica Suárez, docente universitaria, politóloga y contadora pública, decidió lanzarse para ocupar el Rectorado de la UAGRM, quien tendrá que luchar contra viento y marea contra el fuerte machismo que existe al interior de la universidad. En varias oportunidades otras mujeres intentaron llegar a ese importante puesto, pero fracasaron, porque muy pocos votos obtuvieron. Sara Gutiérrez, una vez más, se impulsa a participar de las elecciones. Ambas tienen esta difícil tarea democrática.

Tiempos de cambio en el mundo. ¿Es la hora de las mujeres en puestos claves y decisivos en las universidades? Lo sabremos dentro de poco en la universidad que lleva el nombre del príncipe de las letras bolivianas: Gabriel René Moreno.

Hernán Cabrera M. Lic en Filosofía y Periodista