El medicamento ruso Avifavir tiene el aval correspondiente para el tratamiento del COVID-19 en Bolivia en sus fases leve y moderada, según comunicó el director general de Sigma, Sergio Pol. Se prevé que hasta fines de enero lleguen al país 10.000 unidades y en los próximos dos meses hasta 50.000.

“Concluyó en noviembre la Fase 3 (del examen clínico) y nos enviaron ésta para su presentación a la Comisión Farmacológica Nacional para que puedan evaluar la Fase 3 y la comisión científica de Agemed (Agencia Estatal De Medicamentos Y Tecnologías En Salud) otorgó (su autorización) para COVID en la fase leve y moderada en Bolivia”, aseguró.

Pol detalló que la “base científica” de Avifavir fue publicada el martes en la revista científica de Oxford y recalcó que ésta sigue los protocolos de seguridad de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“Entonces ya tiene base científica publicada que eso es importante porque muchos médicos siempre ante cualquier medicamento nuevo lo que hacen es la base científica”, indicó.

En Bolivia, Avifavir es comercializado a través de farmacias y su venta es bajo receta médica. El precio de venta, según la lista de la Agemed, es de Bs 93,50 la tableta. En 2020, un stock de 9.000 unidades ingresaron al país para el tratamiento del coronavirus, aunque se observó la falta de “base científica”.

Según Pol, para fin de mes o inicios de febrero llegarán a Bolivia 10.000 unidades de Avifavir y se tiene comprometida para los siguientes meses un stock de 50.000 unidades.

“En este momento hay bastante demanda y muchos médicos la están recetando (…) La efectividad es de un 95%. El 65% de los pacientes atendidos al quinto día ya han salido de la enfermedad y el 35% al décimo día y con bajas secuelas pulmonares”, aseguró.

Pol aseguró que se espera hasta marzo tener la “transferencia tecnológica” necesaria para producir Avifavir en Bolivia y abastecer al resto de los países de Latinoamérica.

En septiembre de 2020, el exresponsable de la Dirección Nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud, Virgilio Prieto, dijo que no estaba comprobada científicamente la efectividad del medicamento ruso Avifavir como tratamiento contra el COVID-19.

“El Ministerio de Salud aprobó su importación porque es útil para el tratamiento de la influenza H1N1, pero no está comprobada su acción para el coronavirus”, dijo a propósito del arribo del primer cargamento de Avifavir a Bolivia.

“No lo está trayendo el Ministerio de Salud, es una importación de orden particular”, aclaró Prieto.