Verdades ocultas de un “TSE” cercano al MAS

En la elección nacional, el TSE actuó de una manera temeraria y llevó adelante un gran fraude, que lastimosamente para los bolivianos, pudo disimular por la falta de control electoral de todos los partidos contrarios al MAS, que no tuvieron delegados en todas las mesas de sufragio del país.

A la fecha, ya con el control del poder judicial y viendo la amenaza de perder las elecciones subnacionales de una manera vergonzosa a nivel nacional, lo único que les ha quedado, es inhabilitar a la mayor cantidad de candidatos que se perfilan como seguros ganadores a gran distancia de los candidatos masistas que aparecen, según las encuestas, en algunos casos 3 o 4 peldaños debajo del primer lugar. Situación increíble para el MAS que siempre estaba de primero a gran distancia de los demás.



El tema para Arce, Evo y la cúpula masista, no es que sus candidatos pierdan, sino que el pueblo se dé cuenta del poco apoyo que cuentan a nivel nacional y que salga a luz el fraude perpetrado.

El control electoral que ejercerán el día de las elecciones cada uno de los candidatos ganadores, con delegados de mesa en todos los recintos electorales a nivel nacional, cuidando el voto de su candidato a gobernador y alcalde de una manera sigilosa, desnudará el secreto mejor guardado del TSE que se refiere al padrón electoral.

No hay mentira o delito que no se descubra en el tiempo. Hasta el 7 de marzo, la justicia intentará borrar a los nuevos líderes políticos de oposición. Los opositores mientras tanto, más que seguro, tendrán sus planes “A” “B” “C” para sustituir candidaturas y aprovechar el empute (disculpen la grosería, pero ese será el sentimiento) de la gente, que repercutirá en un triunfo aun mayor de lo esperado.

A partir del lunes 8 de marzo, este país estará pidiendo la cabeza del presidente del TSE por corrupción y Luis Arce Catacora, tendrá la excusa perfecta para separarse de Evo Morales. Como presidente constitucional, tendrá por delante el peor escenario político posible, siendo un hombre que hasta la fecha demostró únicamente sumisión a Evo Morales, incapacidad e ineficiencia como primer mandatario de la nación.

Por sentido común en política, ningún partido político que hubiera ganado unas elecciones generales con más del 55 % de apoyo a nivel nacional, puede bajar en menos de 4 meses, ese apoyo popular en el contexto electoral. Muchos van a justificar, que las elecciones municipales y las regionales departamentales tienen una lógica diferente, y las preguntas obvias serian: ¿dónde queda lo del único partido que tiene estructura nacional?; ¿que el MAS tiene la capacidad de generar nuevos liderazgos?; ¿que el proceso de cambio es lo que quiere la gente?; ¿que el MAS es un proyecto Socialista que quiere la mayoría en Bolivia?; etc.

La mentira tiene patas cortas, y las idiotas explicaciones largas, y para medir el tamaño de la mentira, vamos a tener que medir el largo de la explicación por el ancho de la excusa que nos darán los del partido azul.

Ya hemos visto en los últimos debates, que el lenguaje de los políticos suele servir para ocultar y no para expresar pensamientos. Pero a algunos políticos no habría que intentar de convencerlos de que sean sinceros: porque podría darse el caso, de que no tengan nada que ocultar. Lo que sí es seguro, es que, cuando las personas no pueden soportar algo, que les duele demasiado, recurren a la risa para ocultar su pena e ignorancia.

¡Qué tonto es el que quiere ocultar el odio que asoma por sus ojos con la sonrisa de sus labios!