Ecuador vacunará contra el Covid-19 a mujeres embarazadas, madres lactantes y a niños desde los tres años

A pesar de que las autoridades del Ministerio de Salud han anunciado la inclusión de estos grupos en la vacunación, todavía no se han emitido lineamientos oficiales

Países como México y Paraguay ya han vacunado contra el COVID-19 a mujeres embarazadas (Foto: EFE/Nathalia Aguilar)
Países como México y Paraguay ya han vacunado contra el COVID-19 a mujeres embarazadas (Foto: EFE/Nathalia Aguilar)

Las autoridades del Ministerio de Salud del Ecuador han anunciado, a través de entrevistas en medios nacionales, que se incluirá en el programa de vacunación en contra del COVID-19 a tres nuevos grupos: mujeres embarazadas, madres lactantes y niños a partir de los 3 años.

La información sobre la vacunación a mujeres en estado de gestación y a mujeres en periodo de lactancia la dio el subsecretario de vigilancia médica del Ministerio de Salud, Francisco Pérez, en una entrevista televisiva.



El funcionario explicó que el riesgo de que una mujer embarazada se contagie es alto y pone riesgo la vida de la madre y el niño, por lo tanto es necesario que los médicos que controlan los embarazos decidan, de acuerdo al expediente de salud de la madre, si esta debe recibir o no la vacuna. Sin embargo, informó el subsecretario, el Ministerio de Salud “abre la oportunidad de que las mujeres embarazadas se vacunen”.

En el caso de la vacunación para mujeres embarazadas, quienes deseen acceder a ella, deberán presentar un certificado médico y acercarse a uno de los centros de vacunación, según indicó el subsecretario.

A pesar del anuncio, se ha reportado que hay mujeres embarazadas a las que no se les ha aplicado la vacuna a pesar de llevar el certificado médico solicitado. Esto porque el Ministerio de Salud no ha emitido los lineamientos para la inmunización de este grupo.

El colectivo Una Vacuna Dos Vidas ha realizado una campaña en redes sociales para pedir la inclusión de las mujeres embarazadas y madres lactantes, para la vacunación. En sus redes sociales, han solicitado que el Ministerio de Salud oficialice, a través de un documento, que este grupo se integra al plan de vacunación para evitar “el desorden que se ha causado en los centros”.

La ministra indicó que la farmaceútica Sinovac ha dado luz verde para la vacunación en esa población: “Sin embargo, vamos a seguir basándonos en evidencia científica. Sinovac nos hará llegar información para tomar decisiones, pero las últimas informaciones garantizan la inmunidad en niños”.

Garzón fue enfática en señalar que la aplicación de las dosis se hará de acuerdo a datos estadísticos, sin embargo, el gobierno intentará empezar con la inmunización infantil, que desde el 7 de junio, regresó de forma voluntaria a las aulas de clase. “Vamos a tomar decisiones para ir vacunando a esa población infantil de a poco hasta el próximo año”, explicó.

El médico investigador salubrista de la Universidad de Las Américas de Ecuador (UDLA), Esteban Ortiz, señala que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos y un sinnúmero de estudios respaldan la vacunación en mujeres embarazadas y mujeres en periodo de lactancia porque el riesgo de morir por COVID-19 en una mujer embarazada es mayor. “Esto se ha demostrado en todo el mundo y en el Ecuador inclusive con más de 3.200 embarazadas. El riesgo de que una madre embarazada muera por COVID puede ser mayor al 450%”, explicó el experto.

En Ecuador, según la ministra Garzón, la mortalidad materna se ha disparado y el exceso de muertes causadas por COVID-19 es del 20%.

Sobre la vacuna Moderna, el documento de la PAHO, explica que en un estudio de la vacuna en ratas se llegó a la conclusión de que la vacuna, aplicada durante el período de gestación, “no tenía efectos adversos en la reproducción femenina, el desarrollo del feto y del embrión, y el desarrollo posnatal”.

En cuanto a la vacuna de Pfizer, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no recomienda la vacunación de las mujeres embarazadas. Sin embargo, considera que si la mujer tiene un riesgo elevado, por ejemplo una trabajadora de la salud, “podrá estudiarse la posibilidad de vacunarla en consulta con su proveedor de atención sanitaria”.

El médico salubrista investigador de la UDLA, indica que se ha visto que las vacunas contra el COVID-19 “son seguras y eficaces en adultos y en mujeres que no sabían que estaban embarazadas cuando la recibieron”. Además, el experto explica que las vacunas “en mujeres embarazadas producen protección y tienen un perfil de seguridad sumamente bueno”, por lo que no habría contraindicaciones.

Lo mismo sucedería con las mujeres en periodo de lactancia. Ortiz indica que, a través de la leche materna, las madres pueden transmitir anticuerpos a sus bebés. Sin embargo, la inmunidad que se produce con esta transmisión es pasiva, según explica Ortiz. Esto se da porque los anticuerpos “se quedan viajando en el organismo del niño por un periodo corto”, entre tres y cuatro semanas. La inmunidad pasiva, dice Ortiz, “no dura para siempre y no causa memoria”, pero funciona porque protege al bebé, aunque de forma pasiva.

Aunque también se han visto efectos positivos en la vacunación a niños, Ortiz considera que, en el caso de Ecuador, aún no es momento de inmunizar a los menores, porque aún hay poblaciones más prioritarias como terminar de vacunar al personal de salud.

Fuente: infobae.com