Fuente: https://asuntoscentrales.com
Después de varias horas de diálogo convocado por el viceministerio de autonomías en La Paz, las autoridades de Oruro y de Potosí no pudieron llegar a un acuerdo para resolver el conflicto de límites en una zona del salar de Uyuni, que derivó en la destrucción de cinco domos de un hotel de lujo para atraer de turistas de alto poder adquisitivo.
Como los funcionarios orureños no estaban de acuerdo con algunos puntos del convenio, se pidió un cuarto intermedio sin fecha de conclusión, con el fin de socializar las propuestas. En conferencia de prensa, el gobernador de Potosí, Jhonny Vedia, dijo que el principal punto disenso está en la posición de las autoridades de ambos departamentos sobre la definición de la zona en disputa. Mientras los potosinos aseguran que todo el salar de Uyuni es su territorio, incluso el lugar donde están los domos, los orureños aseguran que se trata de «tierras fiscales no disponibles» que son de propiedad de todos los bolivianos.
Además, aseguran que el INRA saneó toda la zona y le concedió el control al municipio de Salinas, que es un territorio indígena autónomo, donde se encuentra la comunidad de Jiriri, que es la que acordó trabajar con los empresarios hoteleros. Vedia hizo notar la condena de todos los reunidos al ataque a los domos y el compromiso para que haya paz. Autoridades de Salinas aseguran que más de 2.000 hectáreas del salar le corresponde a ese municipio orureño. Recordaron que los potosinos no consideran que haya un conflicto de límites, ya que todo el salar les corresponde.