Abogado a Castillo: medida cautelar ante la CIDH impide el traslado de Áñez a la población penitenciaria

El anuncio del Ministro de Gobierno, de trasladar a la expresidenta Jeanine Áñez -detenida preventivamente en la cárcel de Miraflores- a la población penitenciaria, luego de que denunciara presuntos hechos de tortura en su contra, va en contra de la medida cautelar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y pondría en riesgo la salud e integridad de la interna.

Abogado a Castillo: medida cautelar ante la CIDH impide el traslado de Áñez a la población penitenciaria

Fuente: https://brujuladigital.net



Así lo hizo saber el abogado defensor, Luis Guillén, quien informó que el viernespresentó las solicitudes formales a través de memoriales a la Gobernación del penal para que explique lo sucedido sobre las denuncias realizadas por su defendida en contra de la subteniente de apellido Durán y la propia directora de la cárcel, teniente coronel Maribel Barrenechea.

El jurista explicó que se debe considerar la norma interna del penal de mujeres y el Código de Procedimiento Penal en relación a las internas preventivas, que deben encontrarse en un espacio diferenciado en relación a las personas con sentenciada.

Pero también mencionó que se interpuso una medida cautelar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que a su vez dispuso que el Estado boliviano siga otorgando a la expresidenta el ambiente individual –que actualmente ocupa- ya que las autoridades de Régimen Penitenciario y el Ministerio de Gobierno acreditaron que Áñez podía recibir visitas y que cuenta con una televisión.

“Para acreditar que está bien la expresidenta dijeron que tenía televisión, pero no era verdad, gracias a este informe por el cual se ha querido descargar el Gobierno ante la CIDH es que llevamos una televisión (…). Pero entre otro de los aspectos, porque estamos hablando de una persona hipertensa, y tratar de llevarla a una población común, la pondría en inminente riesgo su salud”, señaló a Brújula Digital.

En todo caso dijo que el Régimen Penitenciario depende del Ministerio de Gobierno, y este a través del ministro, Eduardo del Castillo ofreció “oficiosos” descargos a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

 “Y esta situación de querer trasladarla a la exmandataria a la población es una situación que se viene viviendo desde el momento en que fue trasladada al penal de Miraflores, es algo que han utilizado paraintimidarla y asustarla.

El disgusto y la intimidación que ha sufrido por parte de la subteniente Durán y de la propia directoral del penal, teniente coronel, Maribel Barrenechea –dijo el jurista-  ha provocado que Áñez se descompense, y que se dispare a 160/100 se presión.

“No podemos minimizar lo acontecido, no puede ser que una funcionaria policial que esté encargada de la custodia de una interna detenida preventivamente otorgue estos tratos. Estas son torturas, vejaciones, de parte de la persona que tiene la obligación de custodiarlos, y esta situación ha sido avalada por la coronel Barrenechea”, dijo.

Por su parte, Áñez escribió una carta a pulso en el que señala que “con estos desagradables acontecimientos me siento asustada, amenazada y amedrentada y temo por mí y por mis hijos”.

En carta dirigida a Barrenechea señala: “Señora Directora, son de su conocimiento dos hechos de relevancia jurídica por el abuso y vejación y tortura cometidos en mi contra ocurridos los días 15 y 16 de diciembre protagonizados por su ayudante subteniente Durán, de quien desconozco su nombre completo pero la identifico físicamente sin ningún equívoco y el otro por su propia persona”

Denunció a la subteniente Durán de ingresar abruptamente a su celda. “Pretendió que a la fuerza firme la recepción de una carta que mis propios hijos había entregado a la Dirección en fecha 13 de octubre de este año como queja por tres hechos de abuso cometidos en mi contra y también contra mi hijo José Armando Ribera Áñez, recepcionada”.

Ante su negativa, escribió Áñez, que la policía “me empujó, me dio un golpe y pateó la cama donde yo me encontraba recostada, tirando con sus manos el edredón que en ese momento me cubría obligándome a parar”.

La agresión física fue negada por varios funcionarios y el propio ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, quien anticipó la recuperación de la “sala” que ocupa Áñez para trasladarla a la población penitenciaria.

También la oficial pateó la estufa que se encuentra en la celda de la expresidenta, dejándola tirada, según su denuncia, y la habría gritado “furibunda que yo no tenía derecho por ser una rematada, lo que ocasionó en mi persona tremendo susto, pues me quedé temblando y atemorizada, mi hijo solo atinó a abrazarme tratando de consolarme”.

Este incidente, alteró su presión arterial hasta elevarla a 160/100, razón por la cual fue atendida de inmediato por los médicos quienes tuvieron que medicarme de forma especial para estabilizarla.

“Y el segundo hecho realizado por su persona también dentro de mi celda en horas de la noche donde usted vertió amenazas hacia mi persona”, apuntó Áñez en su carta a Barrenechea.

Áñez es procesada por el caso denominado «golpe de Estado» por los hechos suscitados durante la crisis política y social de octubre y noviembre de 2019, tras las cuestionadas elecciones que derivaron en la renuncia del expresidente Evo Morales, Álvaro García Linera y su posterior fuga del país, así como la renuncia de asambleístas del oficialismo que figuraban en línea de sucesión en el Legislativo. También se la responsabiliza por las masacres de Senkata y Sacaba.