EEUU afirma estar listo para discutir cuestiones de seguridad con Rusia

Washington promete responder con una propuesta más concreta una vez que discuta el asunto con sus aliados.

Fuente: https://actualidad.rt.com



La respuesta más detallada que ha dado EE.UU. a la propuesta de Rusia para garantizar la seguridad europea ha sido la brindada este viernes por un alto funcionario de la Administración Biden en conversación telefónica con periodistas. El oficial dijo que, a diferencia de Moscú, Washington no ve ninguna ventaja en llevar a cabo las negociaciones en público.

La Casa Blanca prefiere que tanto las conversaciones que mantiene con sus aliados como las que luego sostendrán colectivamente con Rusia sean de carácter confidencial.

El alto cargo estadounidense aseguró que su país espera devolver a Moscú una propuesta más concreta la próxima semana, después de hablar con sus países aliados. Y también que, aunque no van a revelar nada en público, se ha querido adelantar que hay algunas cosas en los documentos que serán inaceptables, y que Rusia lo sabe. A esto añadió que hay otras que están dispuestos a trabajar y merecen un poco de discusión.

Negociar una desescalada

Por su parte, el consejero de Seguridad Nacional de Biden, Jake Sullivan, dijo que EE.UU. está esperando un progreso significativo en el trabajo diplomático en Ucrania, pero no dejará de cumplir con las necesidades de defensa del país.

Sullivan sostuvo que para llegar a una desescalada debe haber un progreso significativo en la mesa de negociaciones. Y precisó que «la evaluación actual del Gobierno de Estados Unidos» es que Vladímir Putin «aún no ha tomado la decisión» de invadir Ucrania.

Por su parte, la UE ofreció discutir las propuestas en los escenarios existentes, incluidos el Consejo Rusia-OTAN y la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).

La propuesta de Rusia

El pacto propuesto por Moscú a Washington consta de ocho artículos. El primero de ellos estipula que ambas partes deben actuar en base a los principios de seguridad indivisible y no provocar daños a la seguridad mutua; el segundo, que tanto Rusia como EE.UU. procuren que cualquier organización internacional, alianza militar o coalición en las que participe una de las partes respeten los principios contenidos en la Carta de las Naciones Unidas.

Otros puntos prevén excluir la expansión de la OTAN hacia el Este; no admitir en esa alianza militar a Estados que fueron miembros de la URSS; no utilizar el territorio de otros Estados para atacar a la otra parte; no desplegar tropas y armamento en zonas donde esto sería percibido como una amenaza; no usar bombarderos pesados ni buques de guerra fuera del espacio aéreo y las aguas territoriales nacionales o internacionales; no desplegar misiles terrestres de alcance corto o medio fuera del territorio nacional o en áreas desde donde puedan alcanzar objetivos de la otra parte; y no capacitar al personal militar ni a civiles de países no poseedores de armas nucleares en el uso de ellas.

‘Punto límite’

El viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Ryabkov, manifestó que esas garantías de seguridad deben de ser jurídicas.

«Nuestras relaciones han llegado, por culpa de Washington, a un punto límite y peligroso. Se necesita de manera urgente emprender pasos concretos para reducir el grado de confrontación. La línea cursada por EE.UU. y la OTAN durante los últimos años, encaminada a la escalada agresiva de la situación en el ámbito de la seguridad, es absolutamente inaceptable y extremadamente peligrosa», sostuvo Ryabkov.

‘Una amenaza para la seguridad de Rusia’

El diplomático también hizo hincapié en que las propuestas deben ser examinadas en conjunto y que no son un menú donde se pueda elegir una cosa u otra.

«Como es bien sabido por EE.UU. y la OTAN, la hipotética inclusión de Ucrania en la alianza transatlántica, con la perspectiva de la aparición cerca de nuestras fronteras de complejos de misiles y de ataque con un tiempo de vuelo mínimo hacia Rusia Central, crea amenazas inadmisibles de seguridad para nuestro país, que derivan de esa manera en serios riesgos para todos los Estados implicados», añadió.

En palabras de Ryabkov, la iniciativa rusa no es un ultimátum para Occidente. Pero recalcó que tampoco se puede subestimar su seriedad.

Esas propuestas y conversaciones llegan en momentos de máxima tensión entre ambas potencias. Desde Washington alertan sobre una posible invasión rusa a Ucrania tras el aumento de tropas rusas en la frontera, algo que Moscú ha negado desde el principio. Al mismo tiempo Rusia busca garantías legales que impidan la expansión de la OTAN y el despliegue de armas en el país vecino.