El Kremlin acusa a Biden de aumentar la tensión en Ucrania con sus advertencias

Rusia denunció el jueves los comentarios «desestabilizadores» de Joe Biden, quien amenazó con una respuesta «severa» en caso de ataque contra Ucrania, en momentos en que el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, busca en Berlín el apoyo de los europeos frente a Moscú.

Con Xavier Colàs, corresponsal de RFI en Moscú




 

En el Kremlin han sentado mal las advertencias de EEUU, después de que el mandatario estadounidense dijera que Moscú pagaría un precio elevado si invade Ucrania, incluyendo la pérdida vidas y duras sanciones para su economía.

El presidente estadounidense cree que Rusia intervendrá en Ucrania y avisó que Moscú pagaría cara una invasión a gran escala. Moscú estima que estos avisos no ayudan a reducir las crecientes tensiones sobre Ucrania y podría incluso desestabilizar aún más la situación en la zona.

Para el Kremlin, estas declaraciones «pueden contribuir a desestabilizar la situación» y «suscitar esperanzas totalmente falsas» entre algunos altos cargos ucranianos, según el portavoz, Dmitri Peskov.

Aparte de la invasión de Ucrania, hay otra opción sobre la mesa para el Kremlin. Los diputados comunistas han presentado un proyecto de resolución a la Duma, el Parlamento ruso, que pediría a Putin que reconozca la independencia de los pequeños estados separatistas de Donbás tras proclamar el fracaso de los Acuerdos de Minsk.

Moscú niega tener planes de ataque, pero ha amenazado con un algún tipo de respuesta técnico-militar si Occidente no toma en serio una serie de demandas de seguridad que ha hecho, incluida la de poner fin a la expansión de la OTAN hacia el este.

Blinken se reúne con sus aliados en Europa

Mientras tanto, en la capital alemana, el secretario de Estado norteamericano Antony Blinken inició las reuniones con sus homólogos de Francia y Alemania y con la secretaria de Exteriores británica, antes de unas negociaciones cruciales con el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, el viernes en Ginebra.

El miércoles el secretario de Estado estuvo en Kiev para mostrar su respaldo a Ucrania e instó al presidente ruso, Vladimir Putin, a permanecer en un «camino diplomático y pacífico».

Con decenas de miles de soldados rusos y equipamiento bélico en la frontera ucraniana, los temores de un conflicto mayor en Europa se acentúan.

En este contexto de tensión, Rusia anunció este jueves ejercicios navales en enero y febrero en el Atlántico, el Ártico, el Pacífico y el Mediterráneo, en un contexto de fuertes tensiones con Occidente.

«En total, más de 140 buques de guerra y de apoyo, más de 60 aviones, 1.000 elementos de equipamiento militar y unos 10.000 militares formarán parte» de esos ejercicios, indicó el ministerio de Defensa ruso, citado por las agencias de prensa de ese país.

Según el ministerio, estos ejercicios se realizarán en «aguas y mares adyacentes al territorio ruso» y en «zonas de importancia operativa de los océanos del mundo».

«Se realizarán ejercicios por separado en las aguas del Mediterráneo, el mar del Norte, el mar de Ojotsk, la parte nororiental del océano Atlántico y el océano Pacífico», agregó.

Según esta fuente, esas maniobras a gran escala están organizadas «conforme al plan de entrenamiento de las fuerzas armadas rusas para el 2022».

Fuente:Radio Francia Internacional