Grupos de choque contra la exmandataria, integrados por servidores públicos, realizaron una protesta violenta en el penal de Miraflores. La hija de la expresidenta fue desalojada de ese recinto a empujones.
Fuente: Página Siete
Juan Pérez Munguía
El Juzgado Octavo de Sentencia en lo Penal determinó ayer que la expresidenta Jeanine Añez sea trasladada a un centro hospitalario. No obstante, luego de que el Gobierno movilizara a funcionarios para impedir su salida, el juez Franklin Siñani reculó y dispuso que la exjefa de Estado sea atendida en el penal, así sea “en contra de su voluntad”.
Siñani cambió su decisión a pedido de la gobernadora del penal de Miraflores -que depende del Ministerio de Gobierno a través de Régimen Penitenciario-, quien le hizo conocer “la imposibilidad material” de cumplir esa disposición.
“La Gobernadora del Centro de Orientación Femenina de Miraflores deberá poner en conocimiento del Director del Hospital de Clínicas para que esta autoridad a su vez, en el acto, envíe al Centro de Orientación Femenina de Miraflores, personal médico especializado, insumos y equipamiento necesario para que, restablezcan la salud de la señora Jeanine Añez”, se lee en la decisión complementaria que emitió el juez.
Siñani -se lee en el documento- argumenta que la gobernadora del penal de Miraflores le hizo conocer “la imposibilidad material” de trasladar a Añez a un centro hospitalario, a causa de que en inmediaciones del recinto carcelario se encontraban “grupos movilizados afines y en contra” de Añez.
Para evitar la salida de la exgobernante, mediante grupos de WhatsApp, fueron convocados funcionarios de la Procuraduría, del Ministerio de Gobierno y de la Asamblea Legislativa, con el fin de activar una medida de presión afuera de la cárcel. Esto en clara desobediencia a la primera disposición judicial del juez.
“Compañeras y compañeros, es importante que todas y todos los que pueden movilizarse ahora vayamos al penal de Miraflores. A Jeanine le concedieron acción de libertad para ir al hospital y hay movimiento de la oposición”, se lee en uno de los mensajes que compartieron.
El diputado Beto Astorga, de Comunidad Ciudadana, dijo que estos grupos de choque son Columna Sur, del cual es miembro el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y Los Satucos, organización liderada por el exasambleísta del MAS Gustavo Torrico.
“Una vez más, grupos delincuenciales del MAS agreden a ciudadanos, activistas, e incluso a Carolina Ribera, hija de la expresidenta constitucional Jeanine Añez, que se encontraban realizando una vigilia pacífica. Estos grupos delincuenciales actúan en contubernio con la Policía”, afirmó.
Los hechos
Aproximadamente a las 11:00 comenzó la audiencia virtual en el Juzgado Octavo de Sentencia en lo Penal. El abogado Luis Guillén pidió al juez Siñani que disponga el traslado de Añez a un centro médico para ser atendida y evitar un desenlace fatal.
La exjefa de Estado estaba acompañada de su hija Carolina Ribera. El video del tribunal muestra el momento en el que empieza a descompensarse. En ese instante ingresa una funcionaria del penal para exigir a la hija de la expresidenta que salga.
Tras esto, Añez, quien estaba cubierta por una frazada, empezó a mostrar malestares, le dio náuseas y vomitó. “Por favor, señor juez, le ruego, mi madre está muy mal”, clamó Ribera.
La defensa, en ese momento, solicitó un acto de humanidad, y que se conceda su internación en el centro médico que vean conveniente.
La gobernadora del penal de Miraflores, Estefanía Cervantes, argumentó que la audiencia debía ser suspendida. El juez ordenó que un médico del penal pueda explicar la situación de la expresidenta.
La doctora Mariana García Vargas minimizó el cuadro de Añez. Señaló que tenía “deshidratación de leve a moderado” y que la podían compensar en 20 o 30 minutos. “No (necesita ser llevada a un hospital), el problema es que no acepta ningún tipo de tratamiento (…). Yo pienso que esta conducta no va a cambiar así se cambie al mejor hospital de La Paz”, complementó.
Luego de más de una hora de audiencia, el juez Siñani dispuso que Añez sea internada en el Hospital de Clínicas.
“Este juez, al evidenciar claramente y tener la certeza de que día a día y con el paso de las horas se agrava y se va a agravar más la situación de la señora accionante, debe actuar en representación del Estado y disponer que la misma sea trasladada a un centro de salud, para que, incluso en contra de voluntad, sea atendida por médicos especialistas”, enfatizó.
Entre tanto, un grupo de ocho policías, seis varones y dos mujeres, sacaron a empujones a Ribera del penal. Las imágenes muestran arañazos y golpes en su rostro. Horas más tarde, el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) le dio seis días de impedimento. Ribera anunció que entrará en huelga.
Tras esto, un grupo de funcionarios fue a la cárcel de Miraflores. Entre ellos se identificó también a Lidia Patty, exdiputada del Movimiento Al Socialismo. Los movilizados protestaron por la determinación judicial. Además, ante la inacción de un grupo de policías, quemaron la carpa en la cual se hacía la vigilia en favor de la exmandataria.
Norka Cuéllar, abogada de la exmandataria, denunció que la agredieron afuera del recinto carcelario. El IDIF le emitió un certificado con cuatro días de impedimento.
El senador masista William Tórrez calificó como una farsa lo acontecido con Añez, Ribera y Cuéllar. “Seguramente quieren llamar la atención del Relator de Naciones Unidas”, enfatizó.
El oficialismo se endurece
Durante la visita que desarrolla estos días el relator de la ONU, Diego García-Sayán, el Gobierno y representantes masistas endurecieron su postura sobre la situación de Añez.
En la semana se registraron anuncios extraoficiales de que García-Sayán visitaría a la exmandataria; sin embargo, el encuentro no se confirmó. El protocolo establece que la agenda del representante es manejada por el Ejecutivo.
El 17 de febrero, el diputado Rolando Cuéllar, del MAS, pidió que en el menor tiempo posible Añez reciba una sentencia de 30 años de prisión. “Que no se venga a victimizar con una huelga de hambre”, manifestó.
Ese mismo día, en audiencia, en la que también la exmandataria sufrió una crisis, el representante de la Procuraduría, frente al pedido de su abogada de suspender la sesión, exigió que el médico del penal corrobore su estado de salud.
Ayer, pese a que en la audiencia se vio el deteriorado estado de salud de la exmandataria, la abogada del Ministerio de Gobierno afirmó que por lo expuesto por la doctora García, no había la necesidad de que sea trasladada a un centro de salud.
“Existe ya un informe médico, un acta de junta médica, donde se ha establecido el estado de salud de la hoy privada de libertad, acusada Jeanine Añez; es decir, en esta junta médica se estableció cuál es el estado de salud y el tratamiento que la misma debería recibir”, aseveró.
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Una vez más, grupos delincuenciales del MAS agreden a ciudadanos. Estos grupos actúan en contubernio con la Policía
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