A pesar del embargo de 2014, varios países europeos vendieron armas a Rusia


Varios sitios de investigación europeos como Disclose, Investigate Europe y Mediapart revelan que países como Francia, Alemania o Italia mantuvieron sus exportaciones de material bélico a Rusia a pesar del embargo decretado en 2014 tras la anexión de Rusia. Una revelación incómoda para la Unión Europea, pero que refleja la carrera armamentista del Viejo Continente.



Hace pocos días, el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI) indicaba en un informe que Europa tuvo el mayor aumento en la importación de armas en los últimos cinco años, y la tendencia apunta a una aceleración, tras los recientes anuncios de rearme ante la amenaza rusa.

Aunque las exportaciones de armas cayeron en un 4,6% a nivel mundial en el período 2017-2021 comparado con el quinquenio previo, Europa tuvo un aumento de 19%, según el SIPRI.

«Europa es el nuevo punto caliente», dijo a la agencia AFP Siemon Wezeman, coautor del informe anual de SIPRI. Wezeman indicó que la tendencia al alza comenzó tras la anexión rusa de Crimea en 2014 y los efectos se hacen visibles ahora.

Esta tendencia al rearme europeo se aceleró con la invasión rusa de Ucrania: por primera vez, el bloque europeo como entidad entregó armamentos, como misiles antitanques y fusiles, a un país tercero, en este caso Ucrania, y por un total de 500 millones de euros.

“La Unión Europea ya venía dando pasos de tortuga hacia un proceso para militarizarse y convertirse en un actor militar”, observa Jordi Calvo, experto del Centro Delás Para la Paz, basado en Barcelona.

“Estamos ahora en un momento de shock en el que desde las altas instancias europeas se está aprovechando este momento para probablemente tomar una decisión que vendría dentro de 10 o 20 años que es que la Unión Europea como tal apoye militarmente, e intervenga en conflicto como en este caso el de Ucrania”, agregó Calvo en entrevista con RFI.

Misiles antitanques, fusiles de asalto

Desde el inicio de la guerra en Ucrania, Francia ha suministrado decenas de misiles antitanques provistos de sofisticados sistemas de guiado, Alemania y Suecia suministraron lanza cohetes a Kiev, mientras que países como España o Finlandia – tradicionalmente neutrales – entregaron cientos de miles de fusiles de asalto a Ucrania.

Ante esta transferencia masiva de armamentos, cabe preguntarse si esta estrategia de los europeos tendrá algún efecto en el rumbo del conflicto ruso-ucraniano.

“El envío de armas de Europa actual tiene dos carencias. Desde un punto de vista militar, es analizado como un envió de armamento que no va a conseguir ningún objetivo militar, no va a cambiar el curso de la guerra ni es lo que pretende. Para ello, se debería tener una intervención directa con los ejércitos de la OTAN, algo que nadie quiere, ni va ocurrir”, apunta Jordi Calvo.

“Desde un punto de cultura de paz, el envío de armas tiene también unos aspectos controvertidos: las armas, cuando se envían al conflicto que fuere, caen en manos de a quien se le pretende dar, en este caso el ejército de Ucrania”, agrega el experto en conflictos. “Pero, como con mucha probabilidad, este conflicto puede acabar en que haya una gran parte del territorio ucranio bajo control ruso. Entonces estas armas van a acabar en manos de Rusia, como ha ocurrido en Siria y Libia”, teme Jordi Calvo.

La paradoja del suministro de armas a Rusia

En este contexto bélico, el sitio de investigación independiente Investigate Europe hizo una revelación incómoda. Reveló que 10 países europeos han mantenido sus exportaciones de armamentos a Rusia por un total de 346 millones de euros, a pesar de un embargo de venta de armas decretado en 2014 tras la anexión rusa de Crimea.

Francia por ejemplo, vendió a Rusia «cámaras térmicas para equipar más de 1.000 tanques rusos, así como sistemas de navegación y sensores infrarrojos para aviones de combate y helicópteros» fabricados por Thales y Safran, empresas cuyo mayor accionista es el Estado francés, según el medio Disclose.

Italia por su parte, suministró refacciones para vehículos militares utilizados por Rusia en el frente de batalla, detalló el sitio de investigación francés Mediapart.

Para justificarse, Francia – el país europeo que más material militar ha exportado hacia Rusia, junto con Alemania – afirmó que las armas corresponden a contratos anteriores al embargo de 2014 y que el embargo no es retroactivo.

«Un contrato firmado antes de la anexión de Crimea puede aplicarse. Esta posibilidad está claramente prevista en el régimen de sanciones», indicó el ministerio de Defensa francés. «No se han hecho nuevos contratos con Rusia desde 2014. No se han realizado entregas a Rusia desde el inicio de la guerra en Ucrania», agregó.

Embargo esquivado

El experto en conflictos, Jordi Calvo, explica que el embargo ha podido ser evitado por varios países europeos que son grandes exportadores de armamentos. “Esta presión por vender más armas ha llevado a esquivar el embargo de armas a Rusia que existe desde el año 2014. Los embargos suelen tener letra pequeña. El embargo se refiere a un tipo de armamento. Pero que llamamos material de defensa tiene 22 categorías en la Unión Europea. Hay categorías que no entran en el embargo. Y las empresas buscan a sus clientes y presionan los gobiernos para que aprueben las licencias de exportación de armas”, detalla Calvo.

Este fenómeno “ha pasado en prácticamente todos los países con grandes industrias militares: Francia, Reino Unido, España, que en cierto modo han contribuido a hacer más fuerte al ejército ruso del que ahora dicen querer defenderse”, concluye Jordi Calvo.

Radio Francia Internacional