Gobierno de Nicaragua expulsa a Thomas Ess de Cruz Roja

«Pese a esta situación, el CICR ratifica su compromiso de continuar su labor humanitaria en Nicaragua», dijo María Rivera, coordinadora de comunicaciones de la Cruz Roja para México y América Central.

Foto de una bandera con el logo de la Cruz Roja  

El Gobierno de Daniel Ortega expulsó de Nicaragua al delegado residente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Thomas Ess, cuya entidad humanitaria permitía a familiares conocer la situación de salud de decenas de personas opositoras presas, según trascendió este jueves (24.03.2022).



«El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) confirma que recibió una carta en la que el Gobierno de Nicaragua notifica que decidió retirar el beneplácito a nuestro jefe de misión de Nicaragua», detalló María Cristina Rivera, coordinadora de comunicaciones de la Cruz Roja para México y América Central. Un retiro de beneplácito implica la salida del país del funcionario, quien ya ha abandonado Nicaragua.

«No conocemos las razones de esta decisión que nos tomó por sorpresa. Pese a esta situación, el CICR ratifica su compromiso de continuar su labor humanitaria en Nicaragua, apegada a sus principios de neutralidad, imparcialidad e independencia», explicó Rivera.

La expulsión del delegado del CICR ocurre días después de una decisión similar tomada contra el representante del Vaticano en Managua, Waldemar Stanislaw Sommertag, «imponiéndole que dejara inmediatamente el país», hecho que la Santa Sede calificó de «grave». El presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, el obispo Carlos Herrera, aseguró en ese momento que las relaciones entre Sommertag y la Administración Ortega «no eran buenas».

Sucede también un día después de que el representante permanente de Nicaragua ante la OEA, Arturo McFields, tildara de «dictadura» al Gobierno de Ortega y denunciara las malas condiciones carcelarias en las que se encuentran decenas de «presos políticos» en su país.

La expulsión del delegado del CICR se concreta también una semana luego de que el jefe para México y América Central de ese organismo, Jordi Raich, fuera condecorado por el Ejecutivo de Ortega al término de su misión en la región.

Familiares de las personas opositoras presas habían denunciado recientemente que el Gobierno negó el ingreso en prisión del CICR para constatar su estado de salud, en calidad de organismo humanitario. La Asociación de Familiares de Presos Políticos condenó la expulsión de Ess y valoró el apoyo de la institución que lideró, la que «ha tenido un papel importante» para quienes están en prisión y sus familiares, «haciendo coordinaciones» para «constatar la situación de salud dentro de las cárceles».

El Comité Internacional de la Cruz Roja es una organización humanitaria que llegó a Nicaragua en 2018. En ese año, constató la situación de los cientos de personas detenidas tras protestas antigubernamentales, en medio de una crisis política que aún persiste. Tras una negociación en la que participó Sommertag y la OEA, en 2019 se otorgó una amnistía y decenas fueron liberadas.

ama (afp, efe, ap, 100% noticias)

Fuente: dw.com