Bolivia no tuvo un solo ataque en todo el partido. Farías dijo que deja un equipo para tres eliminatorias.
Fuente: paginasiete.bo
Marco Mejía / La Paz
Colombia le ganó anoche 3-0 a Bolivia y tomó aire para la fecha final de las eliminatorias mundialistas. El triunfo de los cafetaleros les permite aún aspirar a jugar el repechaje.
Lo de la Verde fue historia conocida, ya que tuvo otro pobre rendimiento, es más, no tuvo una sola jugada de peligro sobre el arco del combinado local, una muestra más del bajo nivel del fútbol boliviano.
Tal como pasó en toda la Eliminatoria, el técnico de Bolivia puso en la cancha un equipo que no había entrenado en las sesiones que realizó en la sede de Gobierno. De entrada aparecieron John García y Juan Carlos Montenegro en lugar de Henry Vaca y Jeyson Chura, que habían trabajado con el equipo titular.
Además, la Verde careció de un hombre que tenga la pelota en el medio, el llamado era Ramiro Vaca y tampoco apareció Jaume Cuéllar, de gran momento en el Lugo de España.
Entonces, pasó lo previsible, Bolivia bajo su arco, como ocurrió en los pasados ocho partidos de la competición. Menacho y Montenegro naufragaron solos en el ataque y como no les llegaba pelota, tuvieron que bajar a defender.
Dominio local
Los colombianos se apropiaron desde el primer minuto de toda la iniciativa, la obligación que tenían de ganar los llevó a cometer varios errores por el apresuramiento y nerviosismo de sus hombres que querían llegar pronto a la apertura del marcador.
El gol de la apertura llegó en el minuto 38 con una gran jugada personal de Luis Díaz, que dejó en el camino a Marc Enoumba y sacó un remate a la izquierda de Rubén Cordano, que no pudo hacer nada para que su arco sea vencido. Se tranquilizó con el tanto el seleccionado local y antes del descanso, Cordano salvó del segundo ante un cabezazo de Muñoz.
Por el otro lado, el guardameta David Ospina tuvo un primer tiempo tranquilo porque Bolivia no llegó nunca con peligro.
Segundo tiempo
En el complemento ingreso Ramiro Vaca, quien le dio un poco más de juego en el medio, pero sin ser la solución que se esperaba del tarijeño.
A los cafetaleros les costó encontrar el camino para concretar el segundo gol del encuentro y pudo cumplir su cometido en el minuto 13 con un gran centro de James Rodríguez, que Muñoz no pudo darle dirección a su cabezazo ante una defensa parada.
La afición de Barranquilla despertó en el minuto 27 con el segundo tanto de su combinado. Díaz desbordó por derecha, sacó un centro y Miguel Borja cabeceó solo ante la floja salida de Cordano para liquidar el encuentro.
El local cerró la cuenta con otro cabezazo de Mateus Uribe a los 45 minutos del encuentro.
El marcador no se movió hasta el final del partido, la historia para Bolivia ya es conocida desde hace siete eliminatorias. La estructura que tenemos no sirve, la dirigencia debe presentar a la brevedad posible el proyecto para salvar al fútbol boliviano o dentro de cuatro años la historia continuará siendo la misma.
El martes la despedida será con Brasil, ojalá que no sea otra vergüenza en el final del calvario que tuvo la Verde en la clasificatoria.
