Ser periodista en tiempos de búnkeres, censura y trabas

 

Los comunicadores de radio, televisión y prensa contaron cómo cambió su trabajo y cuáles son sus principales trabas. Todos pidieron más acceso a la información.

Verónica Zapana / La Paz



Periodistas de diferentes medios recuerdan con añoranza la posibilidad de hacer entrevistas con toda libertad en las instituciones del Gobierno, despachar sus noticias desde las salas de prensa y hacer preguntas sin limitaciones. Hoy, enfrentan una cobertura más compleja en medio de las puertas cerradas de las fuentes y oficinas estatales que se convirtieron en búnkeres.

“Hoy el acceso a la información es muy burocrático”, dijo la periodista Wilma Catari, del área de Economía de RTP,  quien indicó que las puertas de las fuentes se cerraron. Recordó que hace unos años un periodista presentaba su credencial y podía ingresar al Palacio de Comunicaciones, pero ahora “si no tienes una cita exclusiva, no entras”.

“Algunas veces sí nos dejaron entrar, pero siempre y cuando uno haya hecho una cita previa y la fuente haya aceptado. Cuando llegas a la puerta, el policía que deja pasar, llama al despacho de la autoridad con la que se concertó la cita y si dice que sí, nos deja pasar”, agregó.

Catari aseguró que no todas las fuentes son accesibles. “Los ministerios de Economía y de Hidrocarburos son los más cerrados”, dijo la periodista, quien hace cobertura hace casi 15 años. Contó que en las conferencias de prensa, las autoridades indican que sólo responderán tres preguntas y algunas veces, y con mucha suerte, eres el afortunado en preguntar. Explicó que tampoco se puede abordar otros temas o sólo se limitan a enviar comunicados. “Por eso accedemos a otras fuentes, por ejemplo: analistas. Esto ocurre porque la información oficial no siempre hay”, sostuvo.

El periodista Marco Belmonte, del área de Economía de Página Siete, recordó que antes los periodistas presentaban su credencial y podían recorrer todas las oficinas. Dijo que -incluso- había una sala de prensa. “Se podía leer los periódicos; ahora todos se quedan en la puerta para ver si con suerte entrevistan a alguna autoridad”.

Esa situación se repite en todas las áreas de cobertura periodística: Sociedad, Política, Cultura y Seguridad, entre otros.

La periodista Patricia Castillo, de Red Uno, lamentó que en esta época es más complicado tener una nota exclusiva porque sólo se puede acceder a información en conferencias de prensa.

En la actualidad, Castillo cubre el área Judicial, antes hizo Política y Salud. Hizo cobertura de los momentos más duros de la pandemia. “Ahora que los casos han bajado, estoy cubriendo Judicial”, dijo y aseguró que  para acceder a una entrevista, en algunas fuentes -como el Ministerio de Justicia, de Defensa, de Gobierno y la Fiscalía-, piden pasar por Comunicación y es  ahí donde existe un cuello de botella. “Necesitamos que los comunicadores entiendan el periodismo de calle y muchos no lo hacen”, agregó la profesional.

Relató que “algunos reclaman sobre periodismo de investigación, pero en televisión es un poco complicado por la inmediatez de la información”, dijo.

A eso se suman la tecnología y las redes sociales. Para supuestamente facilitar el trabajo, las Unidades de Comunicación habilitaron grupos de WhatsApp para pasar las declaraciones, pero en algunos ponen restricciones y no permiten que el periodista pueda escribir o solicitar información.

Dijo que eso pasó en el grupo del Ministerio de Salud, justo en la época más álgida de la pandemia, en la que la gente necesitaba información; lastimosamente “nadie, excepto los administradores, podía escribir en el grupo”. Recordó que gracias a la valentía de algunos periodistas, en una conferencia, se informó al ministro Jeyson Auza. “(Así) nos han hecho caso”.

El periodista del área de Política de Cadena A, Juan Carlos Toro, explicó que lo mismo ocurre en la Casa Grande del Pueblo y en la Asamblea Legislativa Plurinacional.

“Cuando las funciones del Gobierno pasaron a la Casa Grande, nos hemos visto con las puertas cerradas, porque ahora no podemos ingresar si no es un acto o una conferencia de prensa. Antes cuando se reunía el Gabinete, los periodistas ingresábamos al hall de Palacio Quemado y podíamos entrevistar a los ministros”, dijo.

El periodista Armin Copa, de Radio Líder,  aseguró que antes en Palacio Quemado “podían estar varios periodistas de un mismo medio para buscar a la autoridad de su área y hacer entrevistas, pero ahora sólo un periodista puede entrar”.

Esta situación -según Toro- dificulta la búsqueda de información. “Nos damos modos” para comunicarnos con algunas de las autoridades, agregó.

En la Asamblea Legislativa Plurinacional ocurre lo mismo.  “Para ingresar, se canjea la credencial del medio por un pase de prensa, pero por la pandemia no deberían hacer eso”, dijo Toro.

Copa contó que hicieron un reclamo sobre esta situación a los presidentes de las cámaras de Diputados, Freddy Mamani, y   de Senadores, Andrónico Rodríguez. “Pero hasta ahora no hicieron caso”, sostuvo. Indicó que no pueden ingresar sin autorización. “Es muy difícil”, dijo al explicar que cuando reclaman, los policías lo único que dicen:  “Son órdenes de arriba”.

Hoy, en su día, los periodistas piden que haya mayor acceso a la información y que las autoridades les dejen hacer su trabajo.

10
DE MAYO
se celebra el Día del
Periodista  Boliviano.