Ángel Quisbert considera un milagro estar con vida, tras ser rescatados de los escombros de una obra. Tiene intenso dolor en las piernas. Días previos a la tragedia su madre le pidió no trabajar en el lugar.
Fuente: Unitel
«Una madera me alcanzó, ya no podía respirar«, recuerda, Ángel Quisbert, el sobreviviente del desplome de una obra en La Paz. El hombre fue rescatado con vida la noche del jueves y desde entonces permanece en el hospital de Clínicas, desde donde pide ayuda para cubrir los gastos de su recuperación.
Ángel tiene 29 años y hace solo dos semanas comenzó a trabajar en la construcción que se desmoronó en la zona Alto Florida. Tras la tragedia considera que es un milagro estar con vida. Completamente lúcido, pero angustiado por su situación de salud, cuenta que tiene un intenso dolor en las piernas.
«Trate de correr, pero una madera me derrumbó hacia adelante, todo se vino donde mi, no podía respirar, traté de salir, pero otra vez se comenzó a caer todo», relata desde el hospital, donde aún es sometido a diversos análisis.
Gladys, madre espera un informe sobre su salud en el ingreso del hospital de Clínicas. Desde la acera, con lágrimas en los ojos, recuerda que el constructor notificó de la tragedia a su otro hijo, quien avisó a la familia.
«Yo no quería que trabaje en ese lugar, le dije que hay muchas obras a medio construir, ahí andá», recordó con lágrimas la mamá del único obrero rescatado con vida.
Según el reporte médico, el obrero no tiene fracturas, pero sí múltiples lesiones, como torácica, abdomen y miembros inferiores. Se le realizan más estudios.
La madre del paciente igual pide ayuda y dice que el contratista llegó al hospital el jueves y le entregó Bs 700 con el compromiso de volver este viernes, aún lo espera.
Este viernes personal de emergencia realiza tareas de búsqueda de otros dos obreros que estaban en la obra.