Durante su intervención en la Cumbre de las Américas de Estados Unidos, el canciller Rogelio Mayta cuestionó a Washington por la exclusión de tres países y advirtió en la plenaria que los países “no estamos obligados a permanecer donde no se reconocen nuestros derechos ni se puede hallar solidaridad o apoyo en tiempo de crisis”.



Frente a esa situación, el representante de la administración de Luis Arce urgió “cambios fundamentales antes de que sea demasiado tarde, hay que repensar las instituciones y hasta los mismos instrumentos de integración latinoamericano”.

Arce decidió no acudir a la Cumbre de las Américas, por la decisión de Estados Unidos, sede de la IX Cumbre de las Américas, de excluir al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Nicaragua, Daniel Ortega. Antes de oficializarse la no invitación, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canal, decidió no acudir a la cita hemisférica.

“Que la sede de esta cumbre sea los Estados Unidos no les da la potestad para realizar exclusiones minando el espíritu de la Carta de Naciones Unidas y otros documentos fundamentales para las relaciones internacionales”, cuestionó Mayta.

No solo eso, también recordó en la plenaria el papel del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, en la crisis de 2019 en Bolivia, que acabó con la dimisión del expresidente Evo Morales y la toma del poder por parte de Jeanine Áñez, quien ahora se encuentra a punto de recibir una sentencia por el caso Golpe de Estado II.

Una auditoría electoral que realizó personal de Almagro estableció la existencia de irregularidades en las justas de octubre de 2019, lo que agravó una crisis que se venía arrastrando con protestas de cívicas y de oposición que ya anticipaban un fraude electoral. El gobierno de Arce pidió informes a Almagro de ese trabajo de auditoría, pero no respondió a 11 solicitudes.

“Pedimos que se nos proporcione informes de esa auditoría no una vez ni dos, sino once veces hasta ahora, pero no hay transparencia en la OEA de Almagro. Bolivia aún espera una investigación honesta e imparcial sobre lo ocurrido en esa pretendida auditoría electoral”, insistió en un discurso en el que también abogó por una cruzada contra el calentamiento global y la priorización de las necesidades sociales sobre el interés financiero.