La madre habría dejado a la niña a cargo del padre para iniciar otra relación. El agresor aprovechaba las noches para cometer el crimen.
Fuente: Red Uno
Una niña de 11 años era constantemente violada por su propio padre en Punata.
«En los actos investigativos practicados, tenemos inicialmente la valoración psicológica preliminar de la menor, que señala que el padre la vejaba sexualmente en distintas oportunidades, fundamentalmente, en horas de la noche, cuando la víctima se encontraba durmiendo«, informó el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), Alfredo Saravia.
La menor y el agresor vivían juntos, ya que la madre, debido a que sostenía otra relación sentimental, la habría dejado en custodia de su progenitor.
«Este hecho generó en la personalidad de la víctima una respuesta emocional y psicosomática de rechazo hacia su padre. El certificado médico forense obtenido en su parte final señala que tendría una membrana himeneal elástica», agregó Saravia.
El acusado se sometió a un juicio abreviado y fue enviado a la cárcel de El Abra con una condena de 25 años.