El exmandatario de Bolivia, Carlos Mesa, manifestó que no serán “funcionales” para responder ante la Fiscalía sobre un hecho (golpe de Estado) que no ocurrió y que es parte de la narrativa del partido gobernante MAS
El diputado de CC, Carlos Alarcón, y el expresidente Carlos Mesa, ayer en La Paz. | APG
El diputado de Comunidad Ciudadana (CC) Carlos Alarcón se acogió a su derecho al silencio y no respondió a ninguna de las preguntas, ayer, durante su comparecencia ante el Ministerio Público como testigo del caso “golpe de Estado I”. En tanto el expresidente y líder de CC Carlos Mesa ratificó que este proceso es una “cacería de brujas” en contra de la oposición.
“Más del 90 por ciento de las preguntas eran por la reunión en la Universidad Católica que ha sido convocada por la Iglesia católica y estaban convocados representantes de la Unión Europea (…), han debido ser unos 20 minutos, no se les ha dado ninguna respuesta a las preguntas”, indicó Alarcón a Bolivia TV al final de la audiencia.
“Definitivamente, es una cacería de brujas para tratar de involucrar al conjunto de quienes defendimos la democracia durante 21 días”, sostuvo Mesa en declaraciones a los medios de comunicación en la puerta de la Fiscalía Departamental de La Paz.
El jefe de bancada de CC en Diputados Carlos Alarcón fue citado por la Fiscalía para declarar en el denominado caso “golpe I”, investigación que abrió el Ministerio Público a denuncia de la exdiputada Lidia Patty, por los delitos de terrorismo, conspiración y sedición.
Proceso inventado
Mesa ratificó que los casos golpe I y golpe II es un “proceso inventado”, ya que nada tienen que ver con la realidad, además cuestionó la “injusta detención y condena a la expresidenta”, Jeanine Áñez.
Añadió que el Ministerio Público hará un “intento de acusación falaz” sobre un hecho que no ocurrió, como es un supuesto “golpe de Estado” el 2019. Por lo tanto, dijo que no reconocerán “este juicio inventado” y “acusación falsa para blanquear un gigantesco fraude”.
El también exmandatario manifestó que no serán “funcionales” para responder ante la Fiscalía sobre -insistió- un hecho que no ocurrió y que es parte de la narrativa del partido gobernante.