Empresarios bolivianos se adhieren a las resoluciones del Encuentro Empresarial Iberoamericano que aboga por un nuevo pacto social

El presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) Giovanni Ortuño señaló hoy que el sector privado boliviano comparte plenamente el contenido del Manifiesto que suscribieron los empresarios asistentes a la XXXI Reunión de Presidentes de Organizaciones Empresariales Iberoamericanas realizada en República Dominicana y que, entre sus resoluciones aboga por “un nuevo pacto social, que promueva las alianzas público-privadas y comprometa a todos los actores con el desarrollo sostenible, procurando retomar el crecimiento sin dejar a nadie atrás”.

Fuente: CEIB



Ortuño celebró la coincidencia de las propuestas emanadas del foro iberoamericano y la visión de los empresarios bolivianos respecto a temas sustanciales como una mayor y mejor inversión; la defensa de los derechos de propiedad y la libertad de empresas; la plena inclusión de las mujeres; la transformación digital; el desarrollo de capital humano; la transparencia y la ética pública y privada, entre otros.

“Los problemas y desafíos del empresariado boliviano son similares al resto de los países de la región y afectan de igual  manera a todos los niveles de la sociedad, por eso las soluciones deben priorizar la complementariedad y coordinación entre el sector público y privado teniendo como horizonte común el bienestar de nuestros pueblos, y desde los principio señalados en el encuentro de que “sin iniciativa privada no hay desarrollo y que los empresarios no somos el problema, sino la solución”, afirmó Ortuño.

Por su parte, Gastón Serrano, actual Vicepresidente de la CEPB y delegado de la institución al Encuentro Empresarial relievó la gran convocatoria alcanzada y la apertura que mostraron los presidentes de Estado y de Gobierno que escucharon las propuestas de los representantes empresariales al evento. En su alocución, el Vicepresidente de la CEPB señaló que “Los empresarios latinoamericanos hemos sido parte del desarrollo, el crecimiento y la modernización de nuestros países, y hoy también somos llamados a perfilar un futuro que se construirá sobre nuevas realidades políticas, sociales y tecnológicas, pero con los mismos valores del trabajo, la solidaridad y el bienestar común”.

El encuentro empresarial iberoamericano

Entre el 23 y el 25 de marzo, y en el marco de la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, se realizó en Santo Domingo, la XXXI Reunión de Presidentes de Organizaciones Empresariales Iberoamericanas, a la que asistieron más de 1.500 empresarios representando a 23 naciones de América y de la península Ibérica.  En el encuentro se coincidió en la necesidad de promover con mayor énfasis la inversión en la región y se destacó el papel de la iniciativa privada en el desarrollo, además se analizó la situación y perspectivas de la región en temas como sostenibilidad; compromiso social; nuevos modelos de financiación; perspectivas económicas; igualdad de género; infraestructuras, energía y transición ecológica; conectividad y transformación digital; y turismo.

En el evento final de la reunión, los representantes empresariales tuvieron la oportunidad de dialogar con algunos presidentes de estado asistentes, con quienes compartieron las conclusiones del encuentro y les entregaron una Declaración Conjunta en la que insistieron en la importancia de fortalecer las instituciones democráticas para generar seguridad jurídica, estabilidad social y un clima adecuado para las inversiones, el incremento de la productividad y el empleo, así como la transparencia y la integridad en el comportamiento de los gestores públicos, y la defensa de un clima libre de coacciones y amenazas para avanzar hacia la estabilidad, el progreso social, la sostenibilidad, el desarrollo económico y la transformación del modelo productivo.

 

MANIFIESTO
COMPROMISO IBEROAMERICANO CON LA INVERSIÓN

Para que en Iberoamérica podamos alcanzar un verdadero desarrollo sostenible, es fundamental impulsar el crecimiento económico y para ello la inversión privada juega un papel fundamental. Debemos recuperar el atractivo de nuestra región como destino de inversiones mundiales, que ha retrocedido un 7% en los últimos diez años en materia de inversión extranjera directa (IED). Para tal fin, debemos trabajar por la libertad de empresa y la libertad económica, dos factores fundamentales para impulsar el desarrollo económico de nuestra región.

Del mismo modo, debemos abogar por marcos normativos adecuados y estables, que faciliten de manera armónica las legítimas aspiraciones y anhelos de los distintos grupos de interés de nuestras sociedades, evitando ausencias o excesos. Los flujos de capitales extranjeros se relacionan con la voluntad de permanencia de la empresa inversora en el país de destino; su interés es establecer encadenamientos productivos con la economía local; y la promoción de transferencia y diseminación de capacidades tecnológicas y de buenas prácticas de gestión.

Todo ello, impactando de manera directa en la agenda global de desarrollo, especialmente en el ODS 09 (“Industria, innovación e infraestructura”) y en el ODS 17 (“Alianzas para lograr los objetivos”). Para lograr este cometido, las inversiones no se deben regir solamente por criterios financieros y de maximización de beneficios, sino que deben tener en cuenta su impacto en el medioambiente y en el conjunto de la sociedad, sin resignar en solvencia. En este camino, el sector público es un aliado y actor clave para impulsar y estimular la inversión, a partir de políticas públicas con visión de largo plazo y programas de fomento que generen entornos favorables. La colaboración público–privada es una estrategia eficiente para lograr el desarrollo, dando respuestas inmediatas a problemas urgentes y soluciones viables a grandes retos.

Los aquí firmantes, en el marco del Encuentro Empresarial Iberoamericano, suscribimos el siguiente manifiesto:
1- Nos comprometemos a seguir apostando por los países de Iberoamérica, a través de una mayor y mejor inversión que aumente nuestro potencial de crecimiento y genere empleos de calidad.

2- Apostamos por un nuevo pacto social, que promueva las alianzas públicoprivadas y comprometa a todos los actores con el desarrollo sostenible, procurando retomar el crecimiento sin dejar a nadie atrás.

3- Nos comprometemos con la defensa de los derechos de propiedad y la libertad de empresas, instrumentos claves para reducir los costes de transacción, mejorar la asignación de recursos y estimular la innovación.

4- Asumimos el reto de la transformación digital de nuestra región, impulsando la mejora de nuestra productividad y competitividad, superando brechas y alentando la innovación y el emprendimiento.

5- Nos comprometemos a invertir en el desarrollo de capital humano, haciendo nuestro aporte en formación y asistencia técnica.

6- Reconocemos los desafíos en materia de desarrollo de infraestructuras y manifestamos nuestra disposición a colaborar en los grandes proyectos que integren y conecten Iberoamérica.

7- Reconocemos la existencia de significativas brechas de género que condicionan el desarrollo de nuestras sociedades y asumimos el compromiso de promover una mayor integración de la mujer en el ámbito empresarial, evitando toda forma de discriminación arbitraria.

8- Animamos a promover la transparencia y la ética pública y privada para alentar la inversión y mejorar la percepción de confianza de nuestras sociedades.

9- Nos comprometemos a invertir en empresas y proyectos que generen un triple impacto positivo -económico, social y ambiental- alentando el cuidado del medioambiente, la inclusión social y la transición energética.

10- Trasladamos un mensaje claro sobre el papel de las empresas en nuestras sociedades y en nuestra región, esta gran Iberoamérica de todos: sin iniciativa privada no hay desarrollo. Los empresarios no somos el
problema, sino la solución.