Inicialmente, se decía que la medida iba a durar hasta las 18:00 de este martes, ahora se anticipa que será de carácter indefinido. El bloqueo se instaló en el puente de la Amistad, en la ruta nueva Santa Cruz-Cochabamba.
El bloqueo se cumple en el puente Amistad, en la ruta al norte
Fuente: Unitel
Largas filas de motorizados se observan este martes en la ruta nueva que conecta a los departamentos de Santa Cruz y Cochabamba debido al bloqueo instalado por productores soyeros y cañeros en el puente de la Amistad que exigen la abrogación de los decretos supremos 4910 y 4911, que fijan controles y cupos a la venta de combustible.
En un principio, la medida debía cumplirse hasta el final de la tarde de esta jornada, pero, “ante la falta de atención del Gobierno”, los manifestantes decidieron continuar con esta medida de presión de manera indefinida, anunció Epifanio Zurita, dirigente del sector soyero del norte de Santa Cruz.
“Tenemos que irnos con alguna propuesta concreta”, sostuvo Zurita, que espera exista un acercamiento con las autoridades correspondientes en busca de una solución a este conflicto que data de varias semanas y que ha motivado diversos manifiestos institucionales y protestas previas, como el denominado ‘tractorazo’.
Por su parte, Óscar Arnés, dirigente de la Comisión Nacional de Productores de Caña de Bolivia (Concabol) advirtió que este conflicto, lejos de ‘desinflarse’, tiende a incrementarse y más considerando que la zafra aún no ha comenzado en un 100%.
En horas previas a la instalación del bloqueo, el ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina brindó una conferencia de prensa para afirmar que se garantiza el suministro de carburantes.
Indicó en ese marco que algunos sectores están “instigando” a los productores agrícolas a movilizarse contra los decretos 4910 y 4911 que establece fortalecer los mecanismos de regulación, control, supervisión y fiscalización en la comercialización de combustibles.
“Lamentamos que exista algunos sectores que estén instigando a los sectores productores. Lamentamos que existen intereses económicos, políticos que buscan desestabilizar no solo la provisión de combustible, sino generar confusión”, afirmó.