Desde la Fundación Jubileo manifestaron su preocupación porque hace seis años YPFB no da a conocer la certificación de reservas de gas y petróleo. Desde CC ven que la situación genera incertidumbre y especulación
Carlos Villena
Fuente: Unitel
Desde diferentes frentes salieron a cuestionar al Gobierno nacional por la falta de información en torno a las reservas de gas y petróleo, labor que está bajo la responsabilidad de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), tomando en cuenta que la normativa vigente la normativa vigente establece que se debe publicar la información cada 31 de marzo.
El investigador de la Fundación Jubileo, Raúl Velásquez, señaló que la falta de información es una señal que genera incertidumbre en la población, al advertir que ya van seis años en que el país no conoce la situación de las reservas hidrocarburíferas.
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“El no tener la certificación de reservas es algo preocupante, es algo complicado para un país, porque es como que la persona que nos está viendo en este momento no conozca cuál es el extracto bancario de su caja de ahorros en el banco. No sabe si tienes mucho, si tienes poco, si irresponsablemente estás sacando mucho dinero o de pronto podrías sacar más”, ejemplificó Velásquez.
Las reservas de gas boliviano, certificadas a diciembre de 2018, alcanzaban a 8,95 trillones de pies cúbicos (TCF, por sus siglas en inglés), según la información difundida en anteriores gestiones por YPFB.
Asimismo, como antecedente, se conoce que la producción de gas natural en el país comenzó a declinar de 59 millones de metros cúbicos día (MMmcd), en 2014, a alrededor de 38 MMmcd a 2023, según el presidente de YPFB, Armin Dorgathen.
Desde Jubileo observaron que no conocer el dato de las reservas de gas y de petróleo no permite planificar la política hidrocarburífera en el país, mirando los mercados internos y externos, es decir, es una señal de que en realidad la política energética en Bolivia está siguiendo un rumbo errático.
“No hay una planificación clara de mediano y largo plazo que nos permita ver a dónde vamos a llegar, con cuántas reservas tenemos, qué flujos de dinero podemos esperar, a qué mercados vamos a satisfacer, a quiénes vamos a poder vender y si es suficiente para el mercado interno. Son temas que se tienen que resolver a partir de información. Y si no hay información, lo que se va a generar es incertidumbre y especulación”, sostuvo el investigador.
Entretanto, asambleístas de Comunidad Ciudadana exigieron al ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, que presente la certificación de reservas de gas y que no se oculte la información, ya que la premisa es mantener contratos y mercados de venta de hidrocarburos.
“La certificación nos va a permitir mantener contratos y buscar mercados, sin eso damos por desahuciado al sector. ¿Quiénes son los responsables? El ministro y por su puesto el presidente, por eso exigimos traer la certificación porque de eso depende el futuro energético del país”, señaló el diputado Alejandro Reyes.
Por su parte, el legislador Óscar Balderas indicó que no hay certezas en cuanto a la política hidrocarburífera y este es parte de una política extraviada que ha servido para el despilfarro y que puede ser una advertencia de que en el futuro se importe gas.
El domingo, en conferencia de prensa, el ministro Molina apuntó que el informe de cuantificación de reservas está en fase de revisión final y expresó que la consultas debe ser trasladada a la petrolera estatal, sin embargo, YPFB no respondió a las consultas de UNITEL.