Norma, de la mano de Dios; Andrea, “la guerrera”, y Patricia, que tuvo de tutor al “Diablo”, tres madres que vencieron al sistema judicial boliviano

Ellas comparten en común un espíritu que no se doblegó ante las peores injusticias que jueces y fiscales cometieron contra inocentes.

Por Carlos Quisbert

Norma Sumi, durante una protesta en demanda de la libertad de su hijo, el médico Jhiery Fernández. Foto: APG
Norma Sumi, durante una protesta en demanda de la libertad de su hijo, el médico Jhiery Fernández. Foto: APG

Fuente: https://www.vision360.bo



Norma Sumi Segales, Andrea y Patricia, son tres madres que vencieron al injusto sistema judicial boliviano que por años destrozó sus hogares y mantuvo encarcelados a seres queridos que eran inocentes. Todas, no solo lograron la libertad de ellos, sino también fueron el bastión contra el que jueces y fiscales se estrellaron y no lograron doblegar.

En el día de la madre boliviana le presentamos estas tres historias que reflejan el espíritu combativo de mujeres que además de proveer el sustento y consuelo a sus hogares, se convirtieron en abogadas y voceras de los inocentes cuyas vidas se pretendían apagar con fallos injustos.

Norma la madre que de la mano de Dios venció al “monstruo guerrero” de la injusticia para liberar a su hijo, Jhiery Fernández

Patricia Pacajes, la jueza que dictó sentencia contra el joven médico, le dijo esa madrugada que “hay un Dios que hará justicia, no llores”. Meses después, se publicó un audio en el que esa misma jueza confesó que había condenado a su hijo, un inocente, sin pruebas.

Andrea, la “guerrera”, superó tres muertes y luchó por sacar de San Pedro al padre sus tres hijos

Un día después de que apresaron a su esposo perdió a su abuela, semanas después sufrió un aborto espontaneo de un hijo que aún no sabía tenía en su vientre, finalmente, entre 2021 y 2022, su papá y su mamá fallecieron sin poder ver a su familia reunida nuevamente.

Patrícia, la maestra que se convirtió en abogada y aprendió del “Diablo” para demostrar la inocencia de su esposo

Una estudiante de 16 acusó al profesor Salvador de haberla violado y dejarla embarazada, su esposa jamás dudó de él, tomó las riendas de su familia y cargando a su recién nacido se dedicó al caso hasta probar que la adolescente mintió.