La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, a nombre del Gobierno, convocó ayer a Evo Morales a entablar el diálogo hoy a las 18.00 en el Ministerio de Educación con el fin de evitar la “convulsión” del país.
Fuente: ANF
El gobierno de Luis Arce fue blanco de críticas de políticos y activistas porque invitó a Evo Morales a entablar un diálogo luego de acusarlo de buscar gestar un golpe de Estado con su marcha.
Omar Sánchez, representante de las Plataformas ciudadanas del 21F de Cochabamba, subrayó que sólo en Bolivia el gobierno nacional dialoga con su posible “golpista”, debido a que, desde que inició la marcha evista desde Caracollo, advirtieron que Morales busca acortar el mandato presidencial.
“Todo es un chiste en este sentido, porque sólo en Bolivia se dialoga con el ‘golpista’. Estamos hablando de que supuestamente el mismo partido de gobierno le quiere hacer el golpe de Estado al Gobierno (…). Ahora, el supuesto jefe dice que marcha por dólares, por diésel, por la economía, pero no ha presentado una sola propuesta; para que veamos en qué país tan cirquero y de payasadas vivimos”, declaró Sánchez a la ANF.
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La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, a nombre del Gobierno, convocó ayer a Evo Morales a entablar el diálogo hoy a las 18.00 en el Ministerio de Educación con el fin de evitar la “convulsión” del país.
En respuesta a la invitación, el dirigente de la Confederación sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb) “evista”, Humberto Claros, condicionó asistir al diálogo con la extensión de la invitación a “todo el Pacto de Unidad” que representa a todos los sectores sociales del Movimiento Al Socialismo (MAS).
La invitación extendida por el Gobierno a Morales fue criticada por el exdirigente Rufo Calle, afín al Gobierno; aseguró que no hay tema de diálogo, porque de lo único que pueden hablar ambos es del partido y no de los problemas que atraviesa el país.
“No podemos permitir derramamiento de sangre entre bolivianos. Este diálogo debe ser claro y sincero, respetar la Constitución; con base a eso, deben deponer las actitudes. Caso contrario, nos va a traer una confrontación que nadie del pueblo está de acuerdo. Si así lo fuera, los dos váyanse al infierno”, dijo el exdirigente Calle.
También cuestionó al Gobierno por concentrarse en responder a las amenazas de Morales y olvidarse de atender al cien por ciento los problemas del país, como por ejemplo, los incendios forestales, la falta de combustible, la escasez de dólares y el encarecimiento de productos de la canasta familiar.
El diputado arcista del MAS Delfor Burgos también cuestionó la invitación que realizó el Gobierno al expresidente, debido a que la marcha evista busca, en el fondo, garantizar la candidatura de Morales para las elecciones del 2025.
“Con seguridad el Presidente ni nadie del Gobierno va a solucionar esos temas (de candidaturas), porque incumben al Tribunal Constitucional Plurinacional y al Órgano Electoral, esas las instancias deben dar solución a ese tema. Escucharemos qué propuestas tienen para ‘salvar a Bolivia’”, desafió Burgos.
La viceministra de Comunicación, Gabriel Alcón, señaló que la invitación a Evo Morales al diálogo es porque dirigentes evistas pidieron que exista ese espacio; caso contrario, amenazaron con pedir la renuncia del presidente.
“(Pero) detrás de todo esto está la candidatura de Evo Morales, habilitarse a pesar de la Constitución. Se ha mandado un pliego petitorio que tiene las respuestas respectivas”, subrayó Alcón.
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