El inesperado gesto de la vice de Milei con Isabel Perón enciende otra controversia en Argentina

La reivindicación de la figura de la expresidenta contrasta con el respaldo que ha dado Victoria Villarruel a los militares que derrocaron

El inesperado gesto de la vice de Milei con Isabel Perón enciende otra controversia en Argentina

Fuente: https://actualidad.rt.com

La vicepresidenta de Argentina, Victoria Villarruel, provocó una fuerte polémica al publicar unas fotos con la expresidenta Isabel Martínez de Perón, develar un busto en su honor y reivindicar su figura.



«Con Isabel Martínez de Perón, primera presidente mujer del mundo y de la Argentina constitucionalmente elegida», escribió Villarruel en un posteo que, indirectamente, le enviaba un mensaje a Cristina Fernández de Kirchner, quien suele presentarse como la primera mujer presidenta electa de ese país.

La diferencia entre ambas es que Martínez de Perón comenzó a gobernar el 1 de julio de 1974, gracias a que era vicepresidenta y Perón había fallecido, por lo que debía ocupar su lugar. Fernández de Kirchner, en cambio, ganó dos elecciones presidenciales (2007 y 2015).

Villarruel destacó que tenía coincidencias con la viuda de Perón porque fue vicepresidenta y una «argentina bien nacida». El posteo

Las imágenes sorprendieron porque desde que Martínez de Perón se exilió en España, en 1981, ha mantenido un silencio total, alejada por completo de la vida pública. Además, el encuentro con Villarruel implica, al menos, un conflicto histórico.

Martínez de Perón fue derrocada el 26 de marzo de 1976 por militares que después cometieron crímenes de lesa humanidad, y a quienes Villarruel siempre ha defendido.

Provocación

La vicepresidenta basó su carrera política en la reivindicación de la dictadura que, entre decenas de miles de víctimas, persiguió y exterminó a miles de militantes peronistas.

Sin embargo, el punto en común es que Martínez de Perón representó al sector de la derecha del peronismo, que creó la temible fuerza paramilitar conocida como «la Triple A» para reprimir a las guerrillas de izquierda que Villarruel también defenestra. Esos factores protagonizaron la violencia política que antecedió al golpe de Estado.

Por eso los peronistas jamás mencionan ni defienden ni rescatan a la expresidenta, ya que es una de las figuras más controvertidas e incómodas para esta fuerza política.

El posteo de Villarruel implicó una provocación, ya que lo hizo el 17 de octubre, justo la fecha en la que el peronismo celebra el Día de la Lealtad, en recuerdo al nacimiento de un movimiento que ha predominado en la vida política del país durante ocho décadas.

Además de publicar las fotos, la vicepresidenta develó un busto de Martínez de Perón en el Senado, en el mismo momento en el que Fernández de Kirchner y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, encabezaban en sendos actos la conmemoración peronista.

«No vengo a ensalzar su gestión ni su gobierno, sino a cumplir con un acto de reparación histórica hacia una mujer, que viuda y en soledad, debió soportar más de 40 años de persecución y ostracismo«, afirmó Villarruel al explicar los motivos de su sorpresivo revisionismo histórico. Pero las explicaciones no bastaron.

Reacciones

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, denunció que, con el aval a Martínez de Perón, Villarruel  intenta «un camino separado» de Milei, con quien mantiene una fuerte pelea política.

«Lo importante es ‘tirar del carro’ [apoyar] del Gobierno, y no tanto de andar haciendo reivindicaciones históricas de personas muy conflictivas, que además representaron uno de los peores momentos de la economía argentina», señaló.

En redes sociales, uno de los usuarios más asociados a Milei, le reclamó: «Tu agenda debería estar alineada a LLA [La Libertad Avanza], que es la que te dio la oportunidad de ser Vicepresidenta».

Por otra parte, el periodista Mariano Obarrio consideró que todo forma parte de una «sobreactuación» de Villarruel para captar al peronismo de derecha «sin tener en cuenta que Isabel es sinónimo de Triple A y del momento más triste de la Argentina».

El periodista oficialista Eduardo Feinmann fue más contudente con sus críticas. «Me parece una vergüenza lo que hizo Victoria Villarruel (…) Isabelita fue una vergüenza para la Argentina y fue una tragedia (…) me da la sensación de eso no lo votó el 56 % del electorado», advirtió.