La crisis económica que afecta a Bolivia ha llegado también al sector panificador de Tarija, poniendo en riesgo la estabilidad de uno de los alimentos básicos en la canasta familiar. Dilbert Flores, ejecutivo de la Federación de Panificadores de Tarija, ha anunciado la convocatoria a una Asamblea Departamental del sector para analizar las posibles medidas ante esta difícil situación. La reunión busca debatir sobre el impacto de los crecientes costos de producción y, entre las medidas a considerar, se plantea el posible incremento en el precio del pan.
Flores explicó que los panificadores están enfrentando una escalada en los costos de producción, que se han elevado a más del 200 por ciento, afectando gravemente su capacidad para sostener precios accesibles. “Estamos convocando a una Asamblea Departamental del sector panificador para tomar algunas determinaciones respecto a esto que está ocurriendo. La crisis económica afecta a todos los sectores, y ese es el caso del sector panificador”, señaló Flores con preocupación.
A lo largo de los últimos meses, otros sectores clave, como el transporte y los productos básicos, han registrado aumentos de precios que también repercuten en la producción de pan. “Ya estamos en la producción más alta y vemos que varios sectores han incrementado sus precios, como el autotransporte y la leche. Además, se prevé un posible gasolinazo, y el agua también está más cara”, explicó el representante. Según Flores, el incremento de estos costos tiene un efecto dominó que termina golpeando duramente al sector panificador, que se ve obligado a considerar una subida de precios para poder sostener sus operaciones.
La crisis también ha generado frustración entre los panificadores, quienes, según Flores, no han recibido respuesta alguna de las autoridades respecto a sus solicitudes de apoyo. “Nadie dice nada, y ninguna autoridad ha dado ninguna respuesta a nuestro pedido”, expresó con descontento el dirigente. Ante esta falta de respaldo, el sector se ve en la necesidad de analizar opciones para cubrir los crecientes gastos, entre las cuales el alza en el precio del pan se presenta como una medida inminente y preocupante para la población.
El aumento en el precio del pan, un alimento esencial para muchas familias tarijeñas, es una decisión que los panificadores no toman a la ligera. Sin embargo, Flores dejó claro que el contexto actual podría no dejarles otra opción. “Es nomás de analizar el incrementar el precio del pan”, concluyó el ejecutivo de la Federación de Panificadores, dejando entrever que la decisión final será tomada tras la asamblea departamental.
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El sector panificador de Tarija espera que la asamblea permita a sus miembros discutir en profundidad las consecuencias de esta crisis y que, de ser posible, se tomen medidas para mitigar el impacto en los consumidores. Sin embargo, el llamado de Flores también es una advertencia a las autoridades y a la sociedad en general sobre la magnitud de los problemas económicos que enfrenta el país y sobre la necesidad de encontrar soluciones conjuntas para evitar que productos esenciales como el pan se vuelvan inalcanzables para las familias más vulnerables.