El presidente del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), Alberto Pérez, sostuvo que en el norte de Potosí existe una proliferación de ciudadanos colombianos y venezolanos que promueven el narcotráfico en esa región. Esa denuncia ya habría sido realizada antes, pero las autoridades no hicieron nada, según el dirigente cívico.
Fuente: ANF
“El tema de armas es normal allá. Y lo que más se está dándose en estos momentos es el tema de la proliferación de colombianos y venezolanos que evidentemente ahí han hecho ya su guarida para que puedan manejar el narcotráfico. Esto lo hemos denunciado como Comité Cívico, pero la justicia ni la policía hicieron nada”, indicó Pérez a la ANF.
Tras el asesinato de cuatro policías, algunos por arma de fuego, en Llallagua, nuevamente reflotó el tema de “México chico”, el territorio en el norte de Potosí sin presencia del Estado donde campean actividades ilegales.
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En las últimas semanas, el Gobierno destruyó decenas de carpas solares dedicadas a la plantación de marihuana. El viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera, aseguró que esas plantaciones estaban siendo regadas con un programa financiado por el Gobierno.
“Son varios (los que lideran en esa región) y son manos derechas del señor Evo Morales. Hay diferentes lugares donde hay gente de peso, que maneja la plata, manejan dólares y manejan millones; todo está sustentado y está solventado por el narcotráfico”, enfatizó el dirigente cívico.
El asambleísta departamental Herminio Fernández denunció que en su inspección evidenció plantaciones de marihuana cerca de unidades educativas, donde estudiantes de secundaria son cooptados para trabajar en esa actividad ilícita.
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