El experto explicó que existen diferentes elementos que deben ser cambiados por el Gobierno, entre ellos cree pertinente reformar la Ley de Minería, para que permita atraer la inversión de capital extranjero. Consideró que el tema impositivo también es otro factor que debe ser atendido.
Fuente: ANF
“Este punto es muy importante, en realidad se debe evitar los avasallamientos a centros mineros, y si hubiese algún avasallamiento tiene que ser resuelto a la brevedad. El gobierno es el que tiene que dar prácticamente la seguridad jurídica, sino tenemos esto, va a ser muy difícil que pueda llegar inversión extranjera para ese rubro”, afirmó Arce en declaraciones a la ANF.
En un evento académico, organizado por Cumbre del Sajama S.A., la Friedrich Ebert Stiftung (FES) y el Organismo Latinoamericano de Minería – Olami Bolivia, se destacó la magnitud de las riquezas minerales que posee Bolivia y su relevancia estratégica en el contexto de la transición energética global, la industrialización nacional y la diversificación económica.
En ese sentido, Arce dijo que debido a ése y varios aspectos, el sector minero boliviano se encuentra rezagado con relación a otros países, donde se fomenta la exploración y se brinda garantías a las firmas. Espera que las autoridades de Gobierno le presten importancia ya que es un pilar fundamental de la economía.
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“Estamos muy rezagados en este momento, porque hay muy pocas empresas que hacen un trabajo sistemático, y esos son los que proporcionan regalías e impuestos al Estado, y lamentablemente en este momento quedan muy pocas empresas”, manifestó.
El experto explicó que existen diferentes elementos que deben ser cambiados por el Gobierno, entre ellos cree pertinente reformar la Ley de Minería, para que permita atraer la inversión de capital extranjero. Consideró que el tema impositivo también es otro factor que debe ser atendido.
Asimismo, dijo que otro de los obstáculos por los que atraviesan las empresas es el tiempo que demora obtener un contrato minero y su aprobación, afirmó que se debe esperar meses e incluso años para que una firma inicie operaciones de manera legal.
“Más que todo es el trámite que se necesita para tener un contrato minero, se tarda mucho tiempo y, en algunos casos, varios años para poder operar como exige la norma en el país. Hay varios temas que deben ser resueltos; por ejemplo, regular el tema de impuestos, las regalías, el tema de la infraestructura también es importante”, puntualizó.
Potencial minero
El experto destacó el potencial minero de Bolivia, que cuenta con más de 3.000 yacimientos minerales que están distribuidos en distintas provincias geológicas, principalmente en el orógeno Andino y el Precámbrico. Estas áreas comprenden más del 60% del país, consolidándolo como uno de los laboratorios geológicos más completos del planeta, en cuanto a estilos de mineralización.
Asimismo, recordó que el Cerro Rico de Potosí produjo más de 60.000 toneladas finas de plata desde la época colonial. Los yacimientos como Huanuni y Colquiri contienen millones de toneladas de estaño, zinc y plata, mientras que el proyecto Iska Iska, en exploración avanzada, cuenta con más de 600 millones de toneladas de recursos polimetálicos.
Entre tanto, en el oriente, destaca el yacimiento de hierro El Mutún que representa una de las mayores reservas del mundo con más de 40.000 millones de toneladas, abriendo la posibilidad de transformar a Bolivia en una potencia siderúrgica. Arce indicó que si son gestionadas de la mejor manera, pueden generar ingresos multimillonarios.
A la vez, aseguró que el país puede ser un proveedor importante de minerales críticos, esenciales para tecnologías limpias. A eso se suma el potencial de tierras raras como el tantalio y niobio.