Esposas de policías advierten que habrá motín si hay sanciones. El general Óscar Muñoz estuvo al mando y Marcos Farfán y Boris Villegas del Ministerio de Gobierno. Oficiales están indignados por el trato que les dio el Gobierno durante su presencia en la marcha indígena.
Esposas de policías advierten que habrá motín si hay sanciones
Las esposas de los uniformados buscan averiguar qué autoridad de Estado ordenó el operativo y qué jefe policial comandó la violenta intervención en cercanías del puente de San Lorenzo contra los marchistas, al considerar que esta represión tuvo resultados negativos para la institución verde olivo.
Un efectivo escolta a un indígena durante la represión. Foto AFP
La Paz, 29 Sep. (ANF).- Las esposas de policías advirtieron este jueves al gobierno del presidente Evo Morales, que si existen sanciones contra uniformados de bajo rango que participaron en la violenta intervención contra los indígenas del TIPNIS, habrá un amotinamiento en filas verde olivo.
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“Ayer hemos tenido reunión con muchas filiales de la Asociación Nacional de Suboficiales, Sargentos, Clases y Policías (Anssclapol) y se determinó que si les dan de baja, o, hay sanciones, queriéndose lavar las manos con los policías, habrá amotinamiento, porque ya estamos cansados de que seamos manejados como “llocallas”. El policía tiene que servir a la ciudadanía, es del pueblo y no del MAS”, dijo Guadalupe Cárdenas, representante de las esposas de policías, a la red PAT.
Otra de las preocupaciones para las esposas de los policías que cumplieron órdenes superiores para intervenir a la marcha indígena, es que ahora se encuentran abandonados desde el domingo pasado a su suerte en Yucumo, “Nuestros esposos están deshidratando, no están comiendo están tomando agua de algunos pozos, no están equipados”, dijo Cárdenas.
Uno de los cerca de 500 uniformados, que participó del violento operativo, y no quiso identificarse por temor a represalias, dijo que intervinieron la marcha a través de una orden superior, pero que ahora se encuentran abandonados, sin recursos económicos para continuar en Yucumo. “Los policías que se encuentran en la región sólo habrían tenido un viático de 20 bolivianos que ya se les acabó”.
Asimismo, Las esposas de los uniformados buscan averiguar qué autoridad de Estado ordenó el operativo y qué jefe policial comandó la violenta intervención en cercanías del puente de San Lorenzo contra los marchistas, al considerar que esta represión tuvo resultados negativos para la institución verde olivo.
Ayer se realizó una reunión de emergencia de policías, en el módulo policial de la zona de la Merced en el barrio paceño de Villa Fátima, para analizar la situación de los policías que están en Yucumo y por la investigación que se abrirá por los sucesos ocurridos en Chaparina contra la marcha indígena, señala el informe.
Como una última acción por saber la situación de sus esposos se determinó, mandar una carta al nuevo ministro de gobierno Wilfredo Chávez, para que las reciba y advierten de que si no quiere recibirlas tomaran acciones.
Hay malestar en oficiales de la Policía que fueron a Yucumo
Tuvieron una reunión en la EPI, de la zona La Merced. Crisis: Desde capitanes a tenientes coroneles están molestos e indignados por el trato que les dio el Gobierno durante su presencia en la marcha indígena por el TIPNIS.
Página Siete / La Paz – 29/09/2011
Efectivos de la UTOP descansaban ayer en San Borja. Amancaya Finkel / Página Siete
Capitanes y mayores de la Policía boliviana mostraron su molestia contra el Ministerio de Gobierno y el alto mando policial por el trato que recibieron ellos y los subalternos durante su estadía en Yucumo, para impedir enfrentamientos entre indígenas que marchaban en defensa del TIPNIS y los colonizadores que impedían su paso.
“Retornaron de Yucumo sin ninguna orden y por sus propios medios porque la molestia fue grande por la intención de sancionar a los mandos medios y también por el maltrato que sufrieron en ese lugar”, informó a Página Siete un capitán policial que no quiso identificarse.
Ayer, al menos una decena de oficiales regresaron de Yucumo y tuvieron una reunión en la Estación Policial Integral (EPI) de la zona La Merced. En ella, según los testimonios, mostraron su molestia colectiva por el trato recibido. “Nos dieron 13,50 bolivianos por día y una simple botella de Coca-Cola cuesta 15 bolivianos en esos lugares. No teníamos comida, tuvimos que comprar sardina y huevos para comer todos juntos”, declaró otro oficial que tampoco quiso identificarse. Asimismo, los oficiales contaron que al enterarse de que el Gobierno anunció sanciones drásticas para los policías que actuaron con violencia contra los indígenas el domingo, durante la intervención a la marcha, la molestia creció aún más “porque no actuamos así porque quisimos. Teníamos una orden superior y ellos saben bien de quién fue”, aseveró uno de ellos.
Desde el comando general de la institución del orden comunicaron a Página Siete que el martes enviaron cinco buses para recoger a los policías a Yucumo, pero que los pobladores de Caranavi no dejaron pasar a tres. Ayer los enviaron de nuevo.
Uno de los oficiales entrevistados contó que de acuerdo con los testimonios de los efectivos que estuvieron en el lugar, el ex viceministro de Régimen Interior Marcos Farfán llegó la madrugada del domingo a Yucumo “y luego de reunirse con la plana mayor determinó intervenir la marcha”. Asimismo, relató que el asesor legal del Ministerio de Gobierno, Boris Villegas, “hizo comprar masking y otras cosas más para la intervención”.
Al respecto, el ex ministro de Gobierno Sacha LLorenti negó que cualquier instrucción del Gobierno se emita para vulnerar los derechos humanos. “No corresponde responder a especulaciones, pero jamás saldrá algo para vejar a las personas”, dijo.
En la reunión policial de ayer incluso se habló de un posible motín, sin embargo, esa versión no fue confirmada.
Un general al mando
Operativo. Según el testimonio de los oficiales entrevistados, la intervención estuvo a cargo del general Óscar Muñoz Colodro, miembro del alto mando policial, quien a su vez tuvo una instrucción superior para operar en el lugar.
Trato. Sobre el trato recibido, los efectivos señalaron que sus superiores no les dieron un lugar dónde dormir, por lo que tuvieron que acomodarse en barracas y descansar sobre el suelo. Personal del curso comando y de alta dirección se quedaron en Yucumo.
Confirman presencia del Ministerio de Gobierno
Página Siete, Amancaya Finkel / San Borja – 29/09/2011
“Sólo puedo decir que aquí estaba la gente del Ministerio de Gobierno”, dijo un efectivo policial que aún se encuentra en Yucumo y que pidió reserva.
“No me pregunte mi nombre. Yo no tengo nombre”, dijo. ¿Fueron Marcos Farfán y Boris Villegas? los que se hallaban en el lugar del asalto, él contestó: “Ustedes lo han dicho, no lo he dicho yo”. “Cumplíamos órdenes, nada más”, dijo otro de los que esperaba volver a La Paz. Los policías que accedieron a hablar afirmaron que un grupo ya había sido retirado y que algunos de sus compañeros, al no llegar el bus, se fueron por cuenta propia.
En la parada de transporte público había varios efectivos policiales que esperaban una movilidad para dejar Yucumo. “Hay un bus que tiene que venir a recogernos , pero nosotros ya no vamos a esperar más”, comentó otro policía. “Yo tenía miedo. Los indígenas nos estaban esperando con flechas, era para tener miedo. Hacía mucho calor y por eso yo no tenía mi chaleco antibalas puesto”, dijo un efectivo de Umopar y señaló que “nosotros también estábamos en peligro, también tenemos familiares que nos llamaban preocupados para ver si estábamos bien . Dicen que los indígenas no tenían condiciones, pero nosotros tampoco. Yo no podía dormir bien, dormíamos sobre unos palitos, porque estábamos acampando en un aserradero”. “08 nomás, 08” dijo un oficial que pasaba por el lugar y desde entonces las respuestas fueron: “No sabemos, hablen con nuestros superiores, por favor".