Campesinos denuncian que no hay condiciones para la colonización en la frontera. Las instituciones cívicas definirán acciones en contra del plan de asentamientos humanos promovido por el Gobierno en esa región del país
Rechazo: campesinos y zafreros de Riberalta se movilizaron el viernes contra el plan del Gobierno
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La Prensa
El Comité Cívico pandino apoya a los campesinos en su pedido al Gobierno de dotación de tierras. Los campesinos dicen que las tierras que el Gobierno quiere distribuir no son aptas para ser habitadas.
Las instituciones cívicas de Pando se reunirán hoy para definir acciones en contra del plan de asentamientos humanos promovido por el Gobierno en esa región del país. Los pandinos reclaman que les doten de tierras antes que las familias del occidente que serán llevadas a esa zona.
El Comité Cívico de Pando, la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de Cobija, la Asociación Departamental de Municipios (Adem), la Federación de Gremialistas, el Movimiento Sin Tierra, la Federación de Zafreros de la Castaña de ese departamento, el Concejo Municipal y la Federación de Campesinos sostendrán un encuentro que comenzará en la mañana.
La reunión se realizará en la Alcaldía cobijeña, donde los asistentes prevén definir acciones en contra del plan gubernamental de asentamientos.
El proyecto gubernamental dispone el traslado de 4.068 familias de Cochabamba y La Paz a cuatro puntos fronterizos con el Brasil. Se anunció que el movimiento de personas comenzará el 15 de agosto.
El presidente del Comité Cívico, Herbert Salvatierra, informó anoche que las organizaciones pandinas demandan dos cosas antes de que se realice la entrega de terrenos: primero, la dotación de tierras a los campesinos del departamento y, segundo, que el Gobierno otorgue las condiciones mínimas para que esas familias puedan colonizar los terrenos en la frontera con Brasil.
“Hasta las organizaciones masistas (federaciones de campesinos y de gremialistas) se oponen a ese programa de asentamientos. Esto ya se ha convertido en una oposición de toda la región a ese programa. La posición del Comité es impedir que llegue gente hasta que no se cumplan con las dos condiciones anunciadas”.
Sin embargo, la Federación de Campesinos denunció que el Ejecutivo acelera la ejecución de su programa pese a que no existen las condiciones necesarias en las fronteras con Brasil para que familias puedan vivir.
El prefecto de Pando, Rafael Bandeira, rechazó esas acusaciones y dijo que no se está improvisando el plan de traslados. Aseguró que el Viceministerio de Tierras, que coordina el proyecto, no descuidó ningún detalle.
Las demandas
Las organizaciones sociales pandinas se reunieron el sábado con el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, quien les habría informado que el establecimiento de gente en esos lugares se realizará “sí o sí”.
Los indígenas dijeron que la autoridad no escuchó sus argumentos y abandonó la reunión súbitamente. Los originarios entregaron documentos que tratan el problema de la tierra en esa región del país.
Al final de ese encuentro emitieron un voto resolutivo en el que solicitan hablar directamente con el presidente Evo Morales para pedirle que se les dote de tierras.
El secretario de Tierras de la Federación de Zafreros de la Castaña de Pando, Saúl Fernández, informó que a la fecha esa organización presentó 398 solicitudes al Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) sin que se le haya dado respuesta.
En contacto con La Prensa, las dirigentes Gladys Fariña y Nora Montero, de la Federación de Mujeres Amazónicas y la Federación de Campesinos, respectivamente, aseguraron que las zonas donde deberán asentarse los nuevos pobladores no son aptas para ser habitadas. Los campesinos hicieron conocer esas críticas a los representantes del Ejecutivo sin hallar eco. Fariña informó que algunas de las zonas donde se llevarán a cabo los asentamientos no son aptas, puesto que son endémicas (malaria), no existe camino, no hay infraestructura ni servicios. “Es sólo monte bruto”.
Entretanto, en Riberalta, los campesinos también anunciaron que rechazarán el proyecto oficialista de traslado de familias. El viernes, zafreros, campesinos y castañeros iniciaron movilizaciones en contra de los asentamientos. Estos sectores también reclaman recibir tierras antes que personas de otras regiones.
El Gobierno militarizó esa población el sábado y ayer no hubo ningún incidente.